Con homenajes multitudinarios, México dijo adiós a su ídolo, a su “Príncipe de la canción”, luego de que las cenizas arribaran al país mexicano ayer por la mañana.
Ante miles de personas que se encontraban en las calles, el féretro del cantante con sus restos se dirigió al Palacio de Bellas Artes, donde tendría lugar el primer homenaje, sitio en el que han despedido a los artistas más importantes de México.
En el máximo recinto cultural mexicano, los primeros en montar guardia de honor fueron sus hijos José Joel y Marysol, junto con su madre y exesposa del cantante, Anel Noreña.
Otros que montaron guardia de honor fue la alcaldesa capitalina Claudia Sheinbaum, la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto y Roberto Cantoral Jr., director general de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), cuyo padre compuso “El triste”, una de las más famosas canciones de José José.
Durante todo el evento se pudieron escuchar las canciones que hicieran famoso al “Príncipe de la canción” con mariachi, música de la huasteca y coros.
Miles de admiradores pudieron entrar al recinto para despedirse del cantante, quienes les llevaban flores, y uno que otro detalle.
Posteriormente, se ofreció una misa en la Basílica de Guadalupe y de ahí se dirigió a la Colonia Clavería, el barrio donde creció el cantante, y se encuentra una estatua en su memoria. En el sitio se encontraban miles de admiradores del cantante, quienes entre cantos y llantos no dejaban de vitorear a su ídolo.
El cantante mexicano Emmanuel, quien también montó guardia de honor, relató que mantuvo contacto con José José antes de que ingresara al hospital, y recordó aquellos años en los que convivieron. «Desde el primer día que me vio, dijo ‘hermanito ojalá y tengas una linda carrera’. Para mí fue importante porque los artistas consagrados a veces no voltean para abajo… (Era) transparente, humilde, de un alma noble, humilde con todo», expresó el cantante.
Por último, los restos del cantante mexicano fueron traslados al Panteón Francés para ser sepultados al lado de su madre, Margarita Ortiz.
Durante todos los homenajes y recorridos el público no dejaba de aplaudir y vitorear a su ídolo.
La portavoz del Consulado General mexicano en el sur de la Florida, Jéssica Pérez, confirmó a EFE que «las cenizas del intérprete de «El triste» y «Gavilán o paloma» fueron divididas» entre México y Miami.
