Repunta crisis energética en Cuba con déficit de más de 1.700 MW
En La Habana, la Empresa Eléctrica confirmó que la capital estuvo sin luz durante 16 horas y 56 minutos este miércoles 27 de agosto
La crisis eléctrica en Cuba no da tregua. Este jueves 28 de agosto, la Unión Eléctrica (UNE) reconoció que el déficit de generación supera los 1.700 MW, lo que provocó apagones continuos desde la tarde del miércoles hasta la madrugada de hoy.
La empresa estatal admitió que la situación empeora en los horarios de mayor consumo. Solo el miércoles, a las 8:20 pm, cuando la demanda alcanzó su punto más alto, la falta de capacidad llegó a 1.772 MW.
Para este jueves, las cifras tampoco son alentadoras: a las 6:00 am la disponibilidad del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) era de 1.950 MW frente a una demanda de 3.170 MW, lo que ya significaba más de 1.200 MW sin cubrir.
Para el pico nocturno la UNE prevé una afectación de 1.750 MW, con la demanda disparada a 3.760 MW frente a solo 2.080 MW disponibles.
En La Habana, la Empresa Eléctrica confirmó que la capital estuvo sin luz durante 16 horas y 56 minutos este miércoles 27 de agosto. El peor momento se registró a las 8:20 pm, con un déficit de 107 MW.
Aunque el servicio se restableció a las 8:08 am de este jueves, la propia compañía advirtió que los apagones dependen de la crisis nacional y que incluso las reservas previstas para mitigar los cortes ya se han agotado.
Las causas son múltiples y recurrentes: averías en la unidad 2 de la CTE Felton y en dos bloques de la CTE Renté; mantenimientos en la CTE Santa Cruz y en la CTE Cienfuegos; más 477 MW de limitaciones en la generación térmica.
A esto se añade la paralización de 36 centrales de generación distribuida por falta de combustible, que en conjunto aportaban 207 MW.
La UNE asegura que intenta compensar la crisis con la incorporación de motores de generación distribuida (80 MW) y con el arranque parcial de la unidad 6 de Renté (50 MW adicionales).
Sin embargo, reconoce que estos esfuerzos son insuficientes para responder a una demanda cada vez más alta, dejando a millones de cubanos atrapados en apagones interminables que ya forman parte de la rutina nacional.
