Las autoridades cubanas anunciaron una serie de cambios en los núcleos familiares que tengan más de 10 integrantes y cuenten con una sola libreta de abastecimiento.
De acuerdo con el Ministerio de Comercio Interior de Cuba (Mincin) estos cambios iniciarían a partir del próximo 3 de abril.
El comunicado oficialista señala que la escasez de alimentos que existe en el país desde hace año hace muy difícil dividir lo poco que se le entrega a una familia cubana entre los más de 10 miembros, por lo que su solución consiste en dividir los núcleos en grupos más pequeños.
El núcleo se dividiría en dos, tres y hasta cuatro grupos más pequeños, los cuales contarían con su propia tarjeta de abastecimiento.
Con esto, el Mincin planea facilitar el acceso “a los productos de la canasta familiar normada y otros controlados que se comercializan por composición de núcleos”.
Esta solución parece haberle parecido la adecuada a más de uno, pues el desglose de los núcleos se aprobó de forma excepcional.
Criterios para la división de los núcleos con más de 10 miembros:
- Poseer un núcleo familiar compuesto por 10 o más personas.
- El núcleo debe estar de acuerdo en realizar el desglose, pues la división no será obligatoria.
- Los núcleos de 10 a 14 consumidores podrán constituir otro núcleo, además del existente.
- Los núcleos con 15 a 19 consumidores podrán constituir 2 nuevos núcleos.
- Los núcleos con 20 o más consumidores, podrán constituir hasta 4 nuevos núcleos.
- Los núcleos que se desglosen mantendrán el derecho al consumo del combustible doméstico que tenía el núcleo original.
- El comunicado aclara que, en el caso de la venta de productos controlados en las cadenas Cimex y Tiendas Caribe, “se establecerán las fechas para la incorporación de estos nuevos núcleos”.
Cifras oficiales señalan que más de 16.573 núcleos en la Isla cuentan con más de 10 miembros, por lo que la medida podría beneficiar a más de 187.633 habitantes.
Sin embargo, como muchas cosas en el comunismo, la solución se ve bien en papel, pero falta ver qué tan viable sea en la práctica, en especial porque esto no cambia el hecho de que Cuba se encuentra atravesando una de las peores crisis económicas que ha experimentado en décadas.
De cierto modo, la medida solo hará que lo poco que hay en las tiendas sea dividido entre aún más ciudadanos, lo que sin duda afectará a la larga a otros núcleos que pueden no alcanzar varios de los escasos alimentos y artículos.
