Denuncian que un oficial castrista golpeó a un sacerdote yoruba en prisión

Loreto Hernández García, preso político y vicepresidente de la Asociación Yorubas Libres de Cuba, fue golpeado en prisión, padece de hipertensión, diabetes y hasta ahora no ha recibido atención médica.

De acuerdo con su hermano, Jorge Luis Pérez García, mejor conocido como Antúnez, el sacerdote yoruba recibió una golpiza en la prisión Guamajal, en Villa Clara, por parte de un oficial de la prisión.

Antúnez asegura desde Miami al medio de prensa Radio Martí que el pasado martes la familia del yoruba pudo confirmar la compleja situación que este enfrenta en prisión, donde se le ha negado la atención médica que requiere.

“Pudo tener por primera vez su visita familiar, a donde acudieron su hijo Dayron y su hija Rosadel, nos cuenta la situación extremadamente grave que está enfrentando”.

El prisionero asegura que en la prisión se han negado a medirle sus niveles de glucosa y su presión arterial, pese a los riesgos que esto puede traerle a alguien con diabetes.

“Las pocas veces que le han dado las pastillas, prácticamente se las tiran y le dicen ‘confórmate con eso’”, añadió el hermano del sacerdote.

La denuncia señala que la provocación más grande ocurrió dos días antes de la denuncia, cuando un oficial acudió a su celda para decirle que no creía en los opositores ni en la religión yoruba, asegurando que su único santo era Fidel.

Como respuesta, Loreto Hernández le expresó que así como él no creía en la oposición, el sacerdote no reconocía al comunismo, y que su único Dios eran sus santos. Esto provocó que el oficial abriera su celda e ingresara para golpearlo y esposarlo.

El agente castrista lo sacó de allí y lo condujo por un pasillo por el cual llegaron hasta unas escaleras, desde las cuales empujó al religioso.  Antúnez aclara que su hermano no sufrió ninguna fractura grave, pero sí se lesionó la rodilla.

“Según cuentan sus hijos, Loreto Hernández García se siente fuerte espiritualmente, pero ha perdido más de veinte libras de peso”, finaliza la denuncia.

Salir de la versión móvil