El Senado de los Estados Unidos desestimó los cargos del juicio político que hay en contra del cubanoamericano Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional.
La decisión, tomada la tarde del miércoles 17 de abril por una mayoría demócrata, pone fin a una iniciativa impulsada por el Partido Republicano en la Cámara de Representantes.
De acuerdo con la agencia de noticias AP, el Partido Demócrata argumentó que los artículos presentados eran inconstitucionales.
El primero de estos artículos acusaba a Mayorkas de una “negativa deliberada y sistémica a cumplir con la ley de inmigración”, mientras que el segundo afirmaba que cometió “abuso de confianza” al asegurar que la frontera de EEUU estaba segura.
La votación para rechazar el proceso finalizó con 51 votos a favor y 48 en contra. El citado medio recalcó que Lisa Murkowski, senadora republicana de Alaska, solo respondió “presente” al momento de emitir su voto.
Chuck Schumer, líder de la mayoría demócrata, ya había anticipado este desenlace, argumentando que los artículos acusatorios presentados contra Mayorkas no cumplían con los estándares de delitos y faltas graves, y que, en caso de continuar, hubiera sentado un precedente peligroso para futuros casos de juicios políticos.
“Por el bien de la integridad del Senado y para proteger el juicio político para los raros casos en que realmente lo necesitamos, los senadores deberían desestimar las acusaciones de hoy”, dijo al momento de abrir la sesión en la Cámara Alta el miércoles.
Mientras la Cámara de Representantes se las arregló para someter a Mayorkas a un juicio político por su manejo de la situación en la frontera, la desestimación total dicha acusación representa una derrota para el Partido Republicano, en especial para el presidente de la cámara baja, Mike Johnson, quien estableció el proceso como una prioridad.
Aunque el juicio no se llevará a cabo, el hecho de que se haya considerado podría tener resonancia política en este año de elecciones presidenciales, en especial porque la seguridad fronteriza ha sido uno de los puntos principales más discutidos.
De momento, los republicanos continúan criticando la gestión del presidente Joe Biden en el tema migratorio, argumentando que esta ha sido débil y ha permitido que se desarrolle una crisis en la frontera sur del país.
