Crisis eléctrica pinta un mal verano para Cuba: se va de nuevo la Guiteras
Pese a las promesas de la Unión Eléctrica de Cuba, la situación sigue siendo crítica, con apagones prolongados y un déficit significativo
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN) de Cuba atraviesa una crisis severa durante este verano de 2025, que ha afectado a miles de ciudadanos, especialmente en las provincias más alejadas de La Habana.
A pesar de las promesas de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE), la situación sigue siendo crítica, con apagones prolongados y un déficit de energía significativo.
Este lunes 14 de julio, la termoeléctrica Antonio Guitera, ubicada en Matanzas, la mayor planta generadora del país, salió fuera de servicio, lo que generó un nuevo golpe a las ya frágiles proyecciones energéticas del país.
Esta termoeléctrica, que es única en Cuba por operar con crudo nacional, sin depender de importaciones, es clave para la generación de electricidad. El apagón afectó una proyección de 1.825 MW para la noche de ese día.
La jornada del 13 de julio también fue tensa. A las 22:40 horas, durante el pico de demanda, la afectación llegó a 1.732 MW. Este colapso fue causado, en parte, por la falta de combustible en las patanas de La Habana, lo que empeoró la situación.
A las 07:00 horas del 14 de julio, el sistema reportaba una disponibilidad de 1.925 MW, mientras que la demanda alcanzaba los 2.750 MW, lo que dejó un déficit de 873 MW.
Fallas de mantenimiento y falta de combustible
Las principales afectaciones en el sistema eléctrico se deben a fallos y trabajos de mantenimiento en unidades críticas del SEN.
Entre las plantas afectadas se encuentran las Centrales Termoeléctricas (CTE) Felton, Renté, Mariel, Santa Cruz y Cienfuegos. A esto se suma la salida de la Unidad 2 de la CTE Guiteras para trabajos de mantenimiento, que estará fuera de servicio durante cuatro días.
Adicionalmente, la falta de combustible ha dejado fuera de servicio un total de 81 unidades de generación distribuida, lo que ha significado una pérdida de 681 MW. Estos fallos de planificación y la escasez de recursos se han convertido en los principales factores que agravan la crisis energética en el país.
La frustración de la población cubana ante los apagones es innegable. En redes sociales, los ciudadanos expresan su descontento por los cortes de electricidad interminables, las promesas incumplidas y la falta de claridad en las acciones gubernamentales.
Muchos se quejan del calor extremo, la pérdida de alimentos y las dificultades cotidianas. “¿Dónde está la mejora prometida para julio?”, se lee en muchos de los comentarios.



