NOTICIAS DE CUBA

Habla la familia del bebé que falleció durante inundaciones en La Habana

La tía del niño explicó que, a pesar de los esfuerzos de la familia, no fue posible salvar al bebé luego del colapso de uno de los muros de la vivienda

El lunes pasado, una fuerte lluvia causó graves inundaciones en varias zonas de La Habana, dejando a su paso escombros, muros derrumbados y la tragedia de un niño de cinco meses que falleció en su hogar en el municipio de El Cerro.

El pequeño Neymar, quien estaba dentro de su vivienda cuando la tormenta inundó la ciudad, no pudo sobrevivir al colapso de una pared cercana que provocó la inundación repentina en su cuarto.

Karen Rodríguez Dueñas, tía del bebé, compartió con el periodista Mario J. Pentón detalles exclusivos de los momentos vividos por la familia.

“Nosotros estábamos dentro de la casa con los muchachos y eso fue impresionante. En un segundo llegó el agua, no tuvimos tiempo para nada. El muro que dividía la casa del taller se vino abajo, y el agua entró en todas las casas”, relató Rodríguez Dueñas.

La tía del niño explicó que, a pesar de los esfuerzos, no fue posible salvar al bebé.

“Mi sobrinito, de cinco meses, no pudimos encontrarlo. Cuando lo rescatamos, vinieron a decirnos que lo lograron sacar atrás de la puerta, que era donde estaba, porque no lo hallábamos por ninguna parte”, agregó.

Estado precario de las viviendas en El Cerro

Las lluvias, que azotaron la capital cubana, evidencian el mal estado de las infraestructuras, especialmente en barrios como El Cerro, conocido por el deterioro y las filtraciones en sus viviendas.

Vecinos de la zona han denunciado en varias ocasiones el estado de abandono en el que se encuentran las casas, que no son aptas para enfrentar fenómenos naturales.

Hasta el momento, las autoridades locales no han emitido un pronunciamiento oficial sobre la muerte del niño. Sin embargo, han reconocido la magnitud de las afectaciones que provocaron las intensas lluvias.

Uno de los principales problemas que persiste en la ciudad es el envejecido sistema de drenaje pluvial. Este no ha sido capaz de evacuar las aguas de manera eficiente, lo que provoca inundaciones repentinas y convierte las calles en ríos. La falta de un sistema adecuado de drenaje es una de las principales preocupaciones de los residentes.

A pesar de los esfuerzos del gobierno por responsabilizar a la población por el desecho de basura y escombros, la falta de vehículos y combustible en los Servicios Comunales dificulta la tarea de recolectar desechos y limpiar las calles. De igual manera, el régimen castrista mantiene el control total sobre la actividad, excluyendo a los privados de colaborar en esta labor.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas