ICE: cubana con I-220A podría ser deportada tras multa de tránsito
Sus familiares pagaron la multa por su falta, pero en vez de liberarla fue detenida y enviada a las autoridades de migración
Una cubana con estatus I-220A fue detenida este fin de semana en el sur de Florida por conducir a exceso de velocidad, y entregada a las autoridades migratorias por lo que ahora se encuentra en riesgo de deportación.
Al confirmarse que no tenía una situación migratoria definida en Estados Unidos, la policía la entregó a las autoridades de inmigración, lo que complica su permanencia en el país bajo las nuevas medidas implementadas por la administración de Donald Trump.
Según informó el periodista Daniel Benítez, tras el arresto sus familiares acudieron a pagar la fianza, pero no fue liberada y quedó bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
En Florida, donde no existen ciudades santuario, este tipo de casos son frecuentes: una infracción de tránsito puede derivar en detenciones migratorias.
La I-220A otorga un permiso temporal para permanecer en EEUU mientras se resuelve un proceso migratorio, pero cualquier violación de la ley puede poner en riesgo la situación del portador.
En este caso, la infracción coincidió con la entrada en vigor, el 1 de julio de 2025, de la nueva “Ley de la velocidad excesiva peligrosa”, que endurece las sanciones para quienes superen en más de 50 millas el límite o rebasen las 100 millas por hora.
Las penas incluyen hasta 30 días de cárcel en la primera ofensa y hasta 90 días en la segunda, además de multas elevadas y la revocación de la licencia.
Especialistas advierten que estas detenciones pueden afectar de manera directa los procesos de asilo o ajuste de estatus, pues incluso los antecedentes de tránsito son evaluados como parte de la “buena conducta moral”.
El caso llega justo después de que a otro cubano con el mismo estatus migratorio le fuera negado el miedo creíble y quedara igualmente en riesgo de deportación, lo que evidencia que incluso con entrada legal los inmigrantes no están seguros, ni siquiera los cubanos que impulsaron a Trump durante su última campaña.
