Detienen a cubana en Miami-Dade por operar sala de apuestas ilegales
La detención se efectuó luego de que dos agentes encubiertos que se hicieron pasar por jugadores arribaran al establecimiento
La Oficina del Sheriff del condado de Miami-Dade arrestó el fin de semana a una mujer de origen cubano de 52 años de edad, identificada como Kenia Landa, en relación con la operación de una sala de juego ilegal.
La detención, que ocurrió en la noche del sábado, tuvo lugar en el 12218 SW 8 St., en el vecindario de Tamiami, y también involucró a Beatriz Vichot, de 60 años. Ambas mujeres enfrentan cargos por apuestas ilegales y por operar una casa de juego sin licencia.
El establecimiento clandestino de apuestas
Según el reporte de la policía, los agentes encubiertos, quienes se hicieron pasar por jugadores, llegaron al lugar con 50 dólares cada uno, con la intención de realizar un “pago ilegal” en las máquinas tragamonedas.
Durante la operación, Vichot les explicó a los agentes que, si hubieran llegado antes, habrían recibido una promoción especial de 10 dólares adicionales. Además, mencionó que podrían haber jugado bingo si al menos diez personas se reunían en el lugar.
Las autoridades confirman la ilegalidad de la operación
La investigación reveló que el local no tenía ningún propósito legítimo y se utilizaba exclusivamente para realizar apuestas ilegales. Este tipo de actividades están prohibidas en el estado de Florida, salvo en los lugares autorizados como los casinos tribales, hipódromos y loterías.
Consecuencias legales
Kenia Landa y Beatriz Vichot fueron arrestadas por organizar y participar en apuestas ilegales. Landa fue liberada bajo una fianza de 3.650 dólares, mientras que Vichot enfrentó una fianza de 3.150 dólares. Ambas mujeres deberán comparecer ante la jueza Laura Stuzin, del condado de Miami-Dade.
En cuanto a las sanciones, las apuestas ilegales en Florida pueden ser penadas con multas de hasta 500 dólares y hasta 60 días de cárcel si se trata de apuestas menores. Sin embargo, la operación de casas de apuestas o el manejo de apuestas ilegales conllevan consecuencias más severas, incluyendo hasta 5 años de prisión y multas que alcanzan los 5.000 dólares.
Los delitos más graves relacionados con el juego ilegal, como la operación continua de casas de apuestas o plataformas en línea no autorizadas, pueden ser clasificados como delitos de segundo o tercer grado, con penas de hasta 15 años de prisión y confiscación de bienes utilizados en la actividad ilegal.
