Madre cubana exige justicia y respuesta por la muerte de su hijo en el Servicio Militar
La mujer señala que nunca fue notificada sobre el deterioro físico y emocional de su hijo
Mercedes Roque, madre del joven Antonio Rassi Roque, denunció públicamente la falta de respuestas y presuntas irregularidades en torno a la muerte de su hijo, ocurrida el pasado 18 de agosto de 2025 mientras cumplía el Servicio Militar en la unidad del Calvario, conocida como la 50 de la 18/64.
La mujer exige que se esclarezcan las circunstancias del fallecimiento, el cual las autoridades afirman que fue por decisión propia.
Según relató, Antonio ingresó a la unidad el 28 de julio de 2025 y, desde entonces, nunca recibió notificación alguna sobre el deterioro físico y emocional de su hijo.
Mercedes asegura que varios reclutas le contaron que el joven mostraba síntomas de depresión, insomnio, descuido personal y que solo tenía un uniforme sucio.
“Si los propios soldados, que son casi niños, notaron el estado de Antonio, ¿cómo es posible que los responsables no lo vieran?”, cuestionó.
Exige rendición de cuentas
Tras la muerte del joven, la madre acudió repetidamente a las autoridades militares en busca de información. La primera reunión, realizada el 25 de agosto, fue calificada por ella como “totalmente inconcluyente”. Posteriormente, volvió el 15 y el 24 de septiembre, sin obtener atención ni respuestas.
El pasado 30 de septiembre, luego de insistir en permanecer en la unidad, fue finalmente recibida por una comisión compuesta por un teniente coronel de la Fiscalía y varios oficiales, quienes, según su testimonio, no pertenecían a la dirección del destacamento ni eran responsables directos de su hijo.
Una muerte provocada en la unidad
“¿Por qué no se me llamó para informarme lo que estaba pasando con Antonio Rassi? Es simple negligencia y falta de atención; una muerte que se pudo haber evitado”, denunció Mercedes Roque.
“La muerte de mi hijo fue simple y llanamente la reacción de una acción provocada en la unidad”, agregó.
La madre exige reunirse con el jefe de la unidad, el responsable político, el jefe de pelotón y el oficial a cargo del joven en el momento de los hechos. Busca esclarecer lo ocurrido entre las 8:55 a.m. y las 2:45 p.m. del 18 de agosto, lapso que considera lleno de “hermetismo y respuestas imprecisas”.
Silencio oficial y preocupación pública
“Tengo derecho a la entrevista que estoy pidiendo… una muerte que se pudo evitar, una vida que se apagó de un joven criado en esta revolución con su carrera universitaria que nunca llegará a estudiar”, concluyó Roque.
El caso ha despertado inquietud entre los cubanos sobre las condiciones del Servicio Militar Obligatorio, especialmente la atención psicológica y supervisión de los reclutas. Hasta ahora, las Fuerzas Armadas Revolucionarias no han emitido ninguna declaración adicional sobre lo sucedido.
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