El periódico oficialista Juventud Rebelde recoge en sus páginas una denuncia de un ciudadano cubano que afirma haber perdido varios objetos de valor en su trayecto desde Baracoa a Camaguey a bordo de una guagua perteneciente a Ómnibus Nacionales.
Dentro del maletín de Dionelvis Romero Laborí iban un celular, una cajita decodificadora Runch, una memoria de 16 gigas, un cargador de teléfonos Samsung, una linterna Holex, una pinza de electricista, dos destornilladores, un neón y una cuchilla de electricista, que misteriosamente desaparecieron al recoger su maletín cuando culminó el viaje.
El cubano presentó su denuncia ante la terminal de ómnibus de Camagüey donde lo remitieron a la sucursal de Baracoa donde localizó a su jefe por teléfono y al reclamar le dijó en un primer momento no podía atenderle, pues tenía inspección.
Dionelvis preguntó cuándo podría ser, y el jefe le respondió: “Aguanta un momento ahí; así no, ahí si te pierdes en la curvita, porque tu problema no se sabe si se va a resolver”.
“Hasta que al final llegó la gota que derramó el vaso: de manera descompuesta y prepotente, el Jefe de la terminal dijo que él no tenía recursos para solucionar mi problema, que su empresa no era responsable de nada que estuviese dentro del equipaje… Que fuera a la Fiscalía o donde me diera la gana”, relata el ciudadano indignado por la conducta del directivo.
Ante estos hechos, Dionelvis se pregunta: “¿Dónde está la protección al cliente? ¿Pueden existir directivos que nos traten de esa manera y no suceda nada?”
Tras la denuncia, autoridades provinciales determinaron que Gadiel Matos Leyva, jefe de la terminal de Baracoa, violó el reglamento para la atención a las quejas de la población del sector del transporte. No dio el tratamiento indicado al recibir la queja enviada por la UEB Camagüey. Y no la comunicó a quien atiende la oficina de quejas de la población en Ómnibus Nacionales Guantánamo.
Lo insólito del caso fue la medida aplicada al directivo: amonestación pública ante el colectivo de trabajadores en el que se desempeña, según se establece en el Decreto Ley 197, artículo 20, inciso C.
Además, como era de esperarse, el afectado no recibió compensación alguna por su perdida.
Pues de él se señaló su “intachable trayectoria política”: ocupó cargos de dirección de la UJC, el Partido y en otras instancias administrativas, hasta asumir su responsabilidad en ese establecimiento de Ómnibus Nacionales, cargo que desempeña hasta la fecha con buenos resultados, todo ello avalado por las opiniones que emitieron en medio de la tramitación de esta queja las organizaciones políticas, gubernamentales y los órganos del orden público, PNR de Baracoa, así como la de la Empresa de Ómnibus Nacionales.
