Tras las protestas que se vivieron en Cuba por parte del pueblo que exige el fin de la dictadura, el anciano autócrata Raúl Castro reapareció en un acto público junto al puesto a dedo, Miguel Díaz-Canel.
El evento se llevó a cabo en La Habana, donde varios altos mandos del castrismo se reunieron para dar a entender que aún siguen “unidos” frente al descontento popular que actualmente se vive en el país, detalla la Euronews.
El régimen de Miguel Díaz-Canel tiene que seguir explotando la figura de Raúl Castro, uno de los más viejos líderes de la mal llamada revolución, ante el rechazo enorme que tiene la imagen del sucesor castrista dentro de los cubanos.
Raúl Castro aparece en público seis días después de las históricas protestas anticastristas en Cuba, que marcaron un antes y un después, enviándole un fuerte mensaje al régimen comunista.
Díaz-Canel usa la imagen de Raúl Castro
En dicho acto, Díaz-Canel aprovechó el acompañamiento de Raúl para intentar lavar su imagen una vez más, luego de haber promovido una guerra civil entre cubanos.
“Se estimulan y glorifican el desacato y la destrucción de inmuebles, la compulsión al acoso amenazante a ciudadanos y a familias. Ahora mismo lo que el mundo está viendo de Cuba es una mentira”, dijo Díaz-Canel durante la ceremonia.
Pero las palabras de Díaz-Canel parecen estar describiendo más las acciones de los esbirros comunistas que la de los cubanos que manifestaron en contra de su régimen, ya que el saldo hasta ahora es de más de 300 detenidos, un muerto (reconocido por el castrismo) y varios heridos producto de la represión.
“Con pandemia o sin pandemia defender esto, y aquí estamos protegiéndonos y cuidándonos, porque además tenemos que defender lo nuestro”, dijo uno de los manifestantes que estuvo en dicho acto “revolucionario”.
Para Díaz-Canel fue una “sorpresa” que los cubanos hayan tenido la valentía de rebelarse contra el hambre, la miseria y las mentiras del régimen, por lo que optó por usar a Raúl Castro, el último vestigio viviente de la revolución castrista, para intentar cerrar filas y afianzar un poco su régimen.
“Nos quieren y nosotros tenemos que defender por derecho propio nuestra revolución, y en las palabras que él dijo, él dejó claro, para el mundo entero que esto no lo tumba nadie”, añadió una mujer simpatizante de la “revolución”.
