Accidente en la termoeléctrica Renté deja a un trabajador en estado grave
El reporte oficial señala que un operador de turbina terminó con quemaduras en gran parte de su cuerpo
Un grave accidente laboral tuvo lugar el pasado domingo en la Central Termoeléctrica Antonio Maceo Grajales, más conocida como “Renté”, dejando a un trabajador con quemaduras críticas en la mayor parte de su cuerpo.
De acuerdo con las autoridades, el incidente ocurrió durante el arranque y sincronización de la unidad de generación No. 5, cuando se produjo una liberación repentina de vapor a altas temperaturas.
El operador de turbina, identificado como Carlos Rafael López Ibarra, de 33 años de edad, sufrió quemaduras en el 89% de su cuerpo, lo que ha puesto su vida en peligro.
Según un comunicado oficial de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE), el trabajador fue atendido por el equipo médico de la planta y trasladado posteriormente de urgencia al Hospital General Dr. Juan Bruno Zayas Alfonso, donde actualmente se encuentra ingresado en estado crítico extremo y con pronóstico reservado.
Atención médica y situación del trabajador
De acuerdo con el informe del doctor Miguel Ángel Díaz Núñez, director provincial de Salud Pública, el paciente se encuentra consciente, ventilándose de forma espontánea y alimentándose por vía oral.
Los médicos han asegurado que tiene acceso a todos los medicamentos e insumos necesarios para su tratamiento, algo que contrasta con las constantes denuncias hechas por el pueblo, las cuales afirman que los hospitales del país padecen de una marcada escasez de insumos.
El director de la central, el ingeniero Jesús Aguilar Hernández, explicó que se activaron de inmediato los protocolos de seguridad ante el accidente. De igual manera, señaló que se está llevando a cabo una investigación para determinar las causas exactas de la falla en la infraestructura de vapor que originó el accidente.
Accidentes laborales en Cuba
Este lamentable incidente se enmarca dentro de una tendencia preocupante en los accidentes laborales en Cuba. Aunque el número de accidentes ha disminuido en los últimos años, la cifra de muertes laborales sigue siendo alarmante.
En 2024, a pesar de una reducción del 37,7 % en el total de accidentes laborales en comparación con el año anterior, el número de muertes permaneció constante en 52, lo que equivale a una muerte por semana.



