Apagón parcial en occidente de Cuba: sin luz de Pinar del Río a Mayabeque

La empresa estatal Unión Eléctrica de Cuba (UNE) reportó este martes una caída parcial del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) que dejó sin servicio a toda la zona occidental del país, incluido La Habana.

Según la entidad estatal, la desconexión ocurrió alrededor de las 5:00 am y afectó desde Mayabeque hasta Pinar del Río, lo que provocó apagones totales en áreas densamente pobladas y con alta demanda energética. Poco después, la UNE informó que trabajaba en la recuperación del sistema, aunque sin precisar las causas de la falla.

La Habana, uno de los territorios más golpeados por la desconexión, comenzó a recibir apenas una fracción de energía hasta las 10 de la mañana. La UNE señaló que la capital tenía 44 MW incorporados al sistema mientras avanzaban los trabajos para restablecer el servicio en subestaciones locales y zonas de Mayabeque.

El restablecimiento parcial se apoyó también en la entrada en funcionamiento de unidades de Energás y en la contribución de parques fotovoltaicos, que incrementaron su generación a medida que avanzaba la recuperación.

Unas horas después del primer aviso, la UNE confirmó que varias centrales termoeléctricas habían comenzado a incorporarse al SEN. La Unidad 1 de la Central Termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, conocida como Felton, volvió a sincronizarse con el sistema y empezó a elevar su carga.

De igual forma, la Unidad 3 de la CTE Carlos Manuel de Céspedes inició su proceso de arranque y también comenzó a aportar energía. Ambas plantas suelen ser decisivas en el equilibrio del SEN, debido a la limitada capacidad de generación disponible en el resto del país.

Este nuevo episodio llega solo dos días después de que Cuba rompiera otro récord de déficit eléctrico, con el mayor déficit del año este 1 de diciembre, al faltar 2.105 MW para cubrir la demanda de la población, superando el que había sido el mayor déficit hasta ahora en octubre.

A la vez, el incidente se suma al complejo panorama energético que atraviesa Cuba desde hace meses, donde los apagones se han vuelto casi permanentes en distintas provincias, con afectaciones que duran más de 10 horas diarias en algunos territorios.

Las autoridades han atribuido la crisis a averías en termoeléctricas, falta de combustible y problemas estructurales, pero las soluciones anunciadas no han logrado estabilizar el servicio.

En varias ocasiones, la UNE ha informado sobre planes de mantenimiento o recuperación que no han cumplido los plazos previstos, lo que mantiene a la población en un escenario de incertidumbre constante.

La Habana, que habitualmente recibe prioridad en la distribución de carga, también ha experimentado cortes frecuentes durante el año, un indicador de la fragilidad del sistema.

Los apagones prolongados han afectado actividades cotidianas, servicios médicos, transporte y almacenamiento de alimentos, además del funcionamiento de negocios privados que dependen de electricidad para operar.

Aunque la UNE informó que la recuperación avanzaba de manera progresiva en el occidente del país, no ofreció detalles sobre el origen de la desconexión ni un estimado de cuándo podría normalizarse completamente el servicio. Hasta el último parte emitido durante la mañana, las autoridades confirmaron que continuaban incorporándose cargas y restableciendo subestaciones, mientras centrales clave aumentaban su aporte.

Sin embargo, la falta de información precisa y el historial de fallos recurrentes han incrementado las dudas sobre la estabilidad futura del SEN, en una crisis energética que continúa afectando a millones de cubanos sin un horizonte claro de mejoría.