Apagones en Cuba empeoran: envíos de crudo desde México y Venezuela disminuyen
El déficit en las importaciones de combustibles ha dejado a Cuba con solo 45.400 bpd en importaciones totales
Cuba ha sufrido una drástica caída en las importaciones de crudo y combustibles desde países aliados como México y Venezuela durante los primeros diez meses de 2025, lo que ha incrementado la crisis energética en la Isla.
Según datos de transporte y fuentes oficiales de la agencia Reuters, las importaciones de combustibles cayeron más de un 35% en comparación con el mismo período de 2024, lo que ha empeorado la situación de los prolongados apagones que afectan a la población.
Caída en las importaciones de crudo y combustibles
De acuerdo con las cifras oficiales, las importaciones de crudo y combustibles desde México, tradicionalmente un proveedor confiable, se desplomaron un 73%.
En 2024, México enviaba a Cuba 18.800 barriles diarios (bpd), cifra que cayó a 5.000 bpd en 2025. La reducción en la capacidad de producción de México y la necesidad de priorizar otros clientes internacionales son los principales factores detrás de esta caída.
A su vez, Venezuela, el principal aliado político y proveedor de petróleo de Cuba, también recortó sus envíos.
Los documentos internos de PDVSA señalan que las importaciones de crudo desde Caracas bajaron un 15%, pasando de 32.000 bpd en 2024 a 27.400 bpd en 2025. Este descenso afecta principalmente el suministro de fuelóleo, crucial para la generación eléctrica del país.
La crisis energética se profundiza
El déficit en las importaciones de combustibles ha dejado a Cuba con solo 45.400 bpd en importaciones totales, frente a los 69.400 bpd del año anterior.
A pesar de la ayuda puntual de Rusia, que ha suministrado algunos cargamentos de crudo Urales, esta cantidad es insuficiente para satisfacer las necesidades energéticas de la isla.
Déficit energético
La Unión Eléctrica (UNE) informó sobre cortes de energía durante las 24 horas, con déficits que superan los 1.000 MW. La situación empeora debido al deplorable estado de la infraestructura cubana, con numerosas centrales termoeléctricas fuera de servicio debido a averías o trabajos de “mantenimiento”.
De manera específica, se ha detallado que las unidades 2 de la CTE Felton y 3, 5 y 6 de la CTE Renté quedaron fuera del sistema, mientras que la CTE Santa Cruz y la CTE Cienfuegos también presentan imprevistos.
La UNE señala que, en general, 91 centrales de generación distribuida están fuera de servicio por la falta de combustible, lo que equivale a una pérdida de 767 MW de generación.
