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Arranca la descarga de arroz en Holguín con cuatro meses de atraso

A pesar de este esfuerzo, no se ha confirmado aún la fecha exacta en la que los consumidores recibirán el producto en las bodegas

El pasado miércoles 30 de julio dio inicio la descarga de un buque procedente de Guyana con 2.800 toneladas de arroz destinadas a la canasta familiar normada.

El proceso se llevó a cabo en el puerto de Vita, en el municipio de Rafael Freyre, Holguín, y se extenderá durante una semana. Con esto, el régimen busca distribuir el arroz correspondiente a los meses de abril y mayo.

Según Freddy Rodríguez García, jefe de programas del Grupo de Alimentos para las provincias orientales, este cargamento tiene como objetivo garantizar la entrega de ocho libras de arroz pertenecientes a las cuotas de los dos meses atrasados.

A pesar de este esfuerzo, no se ha confirmado aún la fecha exacta en la que los consumidores recibirán el producto en las bodegas.

La operación involucra a trabajadores de los sectores de Transporte y Comercio, quienes se encargan de las labores de descarga, almacenamiento y distribución. Sin embargo, a pesar del esfuerzo conjunto, el atraso sigue afectando la puntualidad en las entregas.

Yurlen Fernández, director del Puerto de Vita, informó que la descarga avanza a un ritmo de 500 toneladas diarias en dos turnos de trabajo. Este ritmo permitirá mejorar las condiciones de recepción de futuros envíos, según el funcionario.

El arroz, esencial en la dieta de los cubanos, llega con un significativo atraso, justo cuando el calendario marca el inicio de agosto. En el mercado informal, el precio por libra de arroz ya ha superado los 340 pesos, una cifra inaccesible para muchos ciudadanos.

Esta escasez de alimentos básicos ha sido una constante en Cuba en los últimos años, afectando sobre todo a las familias más vulnerables.

La libreta de abastecimiento, aunque cada vez más reducida, sigue siendo el único medio para acceder a productos esenciales, especialmente para los hogares con salarios bajos que no cubren sus necesidades básicas.

El panorama de escasez se agrava aún más con el anuncio realizado por el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, en diciembre de 2024, sobre la eliminación progresiva de los subsidios a la canasta básica.

Esta medida, implementada paulatinamente, ha afectado aún más el acceso a productos básicos. Según Marrero, el proceso de eliminación de subsidios es irreversible, lo que ha aumentado la dificultad para muchas familias cubanas que ya luchan por conseguir alimentos básicos a precios elevados.

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