Autoridades de Matanzas bajo alerta por riesgo de fiebre amarilla
El MINSAP indicó que el riesgo de fiebre amarilla es una prioridad debido a unos brotes recientes registrados en Sudamérica
Las autoridades sanitarias de la provincia de Matanzas han elevado la alerta epidemiológica ante el creciente riesgo de fiebre amarilla importada, a pesar de que la transmisión de dengue en el territorio permanece en niveles bajos.
Aunque no se ha registrado una transmisión activa de dengue, el Dr. Andrés Lamas, director del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, señaló que el riesgo de fiebre amarilla es una prioridad debido a los brotes recientes en Sudamérica.
Baja en casos de dengue, pero el peligro persiste
Según las últimas cifras, los casos de dengue en Matanzas han sido los más bajos en los últimos seis años, con un promedio semanal de entre 50 y 90 febriles y muy pocas pruebas IgM reactivas.
Aunque los brotes no se han extendido y no hay ingresos de casos graves, Lamas informó que algunos municipios como Martí, Jagüey Grande, Colón y Calimete presentan casos aislados.
“No hemos tenido dengue grave y los hospitalizados son mínimos, en su mayoría niños. También hemos registrado tres casos de Oropouche, pero es una enfermedad poco frecuente y no suele generar formas graves”, agregó Lamas, destacando la situación controlada en la provincia.
Fiebre amarilla en el radar: un riesgo importado desde Sudamérica
El principal foco de preocupación actualmente es la fiebre amarilla, que podría ser importada desde países de Sudamérica, donde han surgido brotes importantes en la región amazónica, afectando a países como Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador y Venezuela.
Aunque los cooperantes cubanos que trabajan en estas zonas están vacunados, el riesgo sigue latente.
Para prevenir un brote, Matanzas ha implementado un sistema de control estricto tanto en las fronteras como en las áreas sanitarias, con protocolos específicos para actuar en caso de sospecha de fiebre amarilla.
“Contamos con medidas rigurosas que incluyen vigilancia vectorial y clínica, además de estrategias higiénico-epidemiológicas para prevenir la propagación de la enfermedad”, subrayó Lamas.
Vigilancia ante enfermedades respiratorias y COVID-19 continúa
En cuanto a otras enfermedades, la situación de las enfermedades diarreicas agudas (EDA) en la provincia no ha alcanzado niveles epidémicos, aunque los casos aumentan con la llegada del verano.
En el municipio Cárdenas, un brote de hepatitis ha mostrado una curva descendente gracias a las rápidas intervenciones sanitarias.
Por otro lado, las infecciones respiratorias agudas están en ascenso durante la temporada estival, y aunque los casos de COVID-19 se han mantenido bajos, las autoridades siguen alertas ante la circulación de otros virus respiratorios, como el H1N1.
En ese sentido, el Ministerio de Salud Pública ha emitido una alerta sobre la posible circulación de la subvariante XFG del coronavirus, conocida como Stratus, descendiente de Ómicron. Mientras no se ha confirmado oficialmente, el Dr. Francisco Durán advirtió sobre la alta transmisibilidad de esta subvariante, especialmente en su fase asintomática.
