Los cuatro balseros cubanos que fueron rescatados al norte de México la semana pasada, esto tras un terrible viaje en el que pasaron más de un mes a la deriva y perdieron a cuatro compañeros, dejaron en claro su intención de permanecer en el país azteca.
Según un comunicado compartido en redes sociales por el Instituto Nacional de Migración (INM), los balseros indicaron que desean regularizar su estatus migratorio para poder permanecer legalmente en México y no tener que regresar a la Mayor de las Antillas.
Funcionarios del INM en San Fernando, Tamaulipas, hablaron este lunes con los sobrevivientes, quienes dejaron en claro un deseo de “acceder a su regularización migratoria”, para con ello permanecer en México.
Los sobrevivientes fueron identificados como Mario Sergio Márquez Ventura, de 30 años de edad; Yuresqui Romero Hernández, de 33 años; Diosan Fuentes, de 26, y Rogelio Fuentes, de 35 años, quienes fueron ingresados al Hospital General de San Fernando el pasado sábado debido a su avanzado estado de deshidratación y desnutrición en el que fueron encontrados.
El INM señala que dos de estos cubanos ya fueron dados de alta, mientras que los otros deberán permanecer bajo observación en el centro médico. La prensa local señala que Diosan Fuentes era el que presentaba la peor condición.
#Comunicado 📄 @INAMI_mx #Tamaulipas recibe a cuatro ciudadanos de #Cuba 🇨🇺, rescatados en la playa La Carbonera por parte de Protección Civil del municipio de San Fernando. Dos fueron dados de alta y dos más permanecerán hospitalizados en observación.
🔗 https://t.co/UDLyGxVDPQ pic.twitter.com/8hrWFb5sAV— INM (@INAMI_mx) May 6, 2024
El director del hospital, David García Luna, afirmó que los cuatro balseros se encontraban evolucionando satisfactoriamente, aunque debían de permanecer bajo observación unos cuantos días más para estar seguros.
Las autoridades migratorias mexicanas agregaron que se mantendrán atentos a la evolución de los sobrevivientes.
Los ocho balseros salieron de la Isla el pasado 1 de abril con destino a los Estados Unidos, pero su bote se vio afectado por fuertes olas y tormentas que los sacaron de su rumbo. Por si fuera poco, su timón se rompió, por lo que quedaron a merced de las corrientes marinas.
La prensa local señala que cuatro de los cubanos perdieron la vida a causa del hambre y la falta de agua, pero que los sobrevivientes se negaron inicialmente a tirar los cuerpos al mar. Sin embargo, tras varios días, “no tuvieron otra opción”.
Hasta ahora, las autoridades castristas no han revelado la identidad de los cuatro balseros que murieron en el viaje.
La embarcación de los cubanos fue avistada a unos tres kilómetros de la costa por un grupo de pescadores locales, los cuales los llevaron hasta tierra firme. Ahí, recibieron asistencia médica por parte de personal de Protección Civil.
El régimen no se pronunció al respecto hasta el lunes, cuando afirmó que funcionarios cubanos en México “estaban al tanto” de lo ocurrido en Tamaulipas y estaban en camino para hablar con los sobrevivientes.
