Cabeza hallada en Santiago de Cuba: familia de la víctima revela detalles
La víctima fue identificada como Ángel Luis Mercantety Quiñones, quien, según sus seres queridos, conocía a su agresor
Luego de que el hallazgo de una cabeza humana en un basurero de Santiago de Cuba sacudiera a la comunidad esta semana, familiares de la víctima, identificada como Ángel Luis Mercantety Quiñones, han revelado más detalles sobre el caso.
El hombre, de 74 años, fue reportado como desaparecido el pasado 21 de agosto de 2025, visto por última vez en el reparto Abel Santamaría, después de haber sido invitado por un vecino a ver televisión en su casa.
El resto del cuerpo fue hallado en la vivienda del principal sospechoso, luego de que las autoridades ejecutaran una investigación.
Testimonio del hijastro
Ricardo Eudi Soler, hijastro de la víctima, indicó a Martí Noticias que su padrastro había sido invitado por un vecino de 60 años, quien le ofreció pasar un rato en su casa viendo televisión.
“Me dijo que le daba pena porque el señor ya lo había invitado varias veces, entonces iba a ir a estar un rato allá con él, y desde esa noche que él salió… No volvió más”, relató Soler.
Este testimonio señaló una relación aparentemente cordial entre la víctima y el sospechoso, pero la desaparición del hombre comenzó a desatar una serie de versiones contradictorias que dificultaron la localización del paradero de Mercantety.
El hallazgo de la cabeza y el resto del cuerpo
El 26 de agosto, las autoridades de Santiago de Cuba encontraron una cabeza humana en avanzado estado de descomposición dentro de un contenedor de basura en el reparto Abel Santamaría.
Horas después, el cuerpo decapitado de Mercantety fue hallado en la vivienda del vecino sospechoso. “Primero la cabeza en un contenedor y luego los restos del cuerpo en la casa de ese señor”, indicó Soler, quien fue citado al cementerio de El Cobre para confirmar la identidad de los restos.
Una comunidad preocupada por la brutalidad del crimen
Este macabro hallazgo ha dejado a los habitantes de Santiago de Cuba profundamente consternados. Mercantety era conocido en el vecindario por su carácter introvertido y su fuerte vinculación con su familia.
No solía participar en actividades sociales fuera de su hogar, lo que hace aún más desconcertante la brutalidad de su muerte. Soler expresó su dolor por el crimen, señalando que la incertidumbre vivida por su familia durante los días de búsqueda había sido desgarradora.
La confesión del sospechoso
El 27 de agosto, las autoridades detuvieron al sospechoso, un hombre de 60 años, quien confesó haber cometido el asesinato.
Según las autoridades, el móvil del crimen fue un ajuste de cuentas tras una discusión que surgió mientras ambos bebían alcohol en la vivienda del sospechoso la noche del 21 de agosto.
“El hombre confesó haberlo privado de la vida violentamente”, indicaron fuentes del Ministerio del Interior.
Este caso se suma a la creciente ola de criminalidad en Cuba, reflejada en un informe reciente del Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC), que documentó 1.319 delitos verificados en el primer semestre de 2025, cifra superior a la total del año anterior.
El analista Juan Antonio Blanco, director de Cuba Siglo 21, afirmó que el asesinato de Mercantety ejemplifica un preocupante fenómeno de “haitianización” o “centroamericanización” en la Isla, caracterizado por una violencia más brutal y desmedida.



