Crisis sanitaria en Cuba por aumento de enfermedades transmitidas por mosquitos
Las autoridades señalan que la cantidad de personas en terapia intensiva por estas enfermedades ha aumentado
El país enfrenta una grave crisis sanitaria debido al aumento de enfermedades transmitidas por mosquitos, como el dengue, zika y chikungunya.
En los últimos días, las autoridades sanitarias han informado sobre un incremento en los casos graves de arbovirosis, con más de 13.000 personas sospechosas de tener enfermedades febrilmente asociadas a estos virus.
Esta situación ha puesto bajo presión al sistema de salud cubano, que lucha contra la falta de recursos y equipos médicos.
Aumento de casos graves de arbovirosis
El Ministerio de Salud Pública (Minsap) ha confirmado que el número de pacientes en estado crítico ha crecido debido a la propagación del serotipo 4 del dengue, que ha incrementado la gravedad de la enfermedad, especialmente en aquellos que ya han sido infectados previamente.
Según Carilda Peña García, viceministra de Salud, la cantidad de personas en terapia intensiva ha aumentado y se ha registrado una muerte por complicaciones del dengue en la última semana.
La tasa nacional de incidencia de arbovirosis ha alcanzado los 24.3 casos por cada 100.000 habitantes.
Provincialización del brote y escasez de recursos
Las provincias más afectadas son Guantánamo, Matanzas, Ciego de Ávila, La Habana y Cienfuegos. En estos lugares, hospitales y policlínicos están desbordados, y la falta de insumos médicos está dificultando una respuesta eficiente al brote.
A pesar de las limitaciones económicas del país, las autoridades han redoblado esfuerzos con fumigaciones y el uso de más de 2.300 máquinas para combatir al mosquito Aedes aegypti, principal transmisor del dengue. La movilización de 26 vehículos especializados en fumigación ha sido esencial, aunque la escasez de recursos sigue siendo un desafío.
Medidas preventivas y consejos para la población
Ante la emergencia sanitaria, las autoridades cubanas han instado a la población a tomar medidas preventivas, tales como el uso de repelentes, mosquiteros y ropa protectora para evitar las picaduras.
También han subrayado la importancia de acudir al médico ante los primeros síntomas de fiebre o malestar general, ya que el diagnóstico temprano puede prevenir complicaciones graves.
La vigilancia constante y la higiene ambiental son factores clave en la lucha contra esta epidemia. Las autoridades confían en la fortaleza del sistema de salud cubano, reconocido internacionalmente por su capacidad para enfrentar epidemias.
