Denuncian ataque con cócteles molotov a la Embajada de Cuba en Washington
El canciller cubano Bruno Rodríguez acusó sin pruebas a los grupos calificados como “anticubanos” por el régimen de La Habana
El canciller castrista Bruno Rodríguez Padilla acudió a redes sociales para denunciar un supuesto ataque que se llevó a cabo la noche del domingo 24 de septiembre en contra de la Embajada de Cuba en Washington D.C., Estados Unidos.
De acuerdo con la versión compartida por el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, alguien arrojó al menos dos cócteles molotov en el exterior de la sede diplomática. Rodríguez aclaró que el incidente no generó lesionados ni fallecidos.
“En la noche de hoy, 24/9, la Embajada de #Cuba en EEUU fue objeto de un ataque terrorista de un individuo que lanzó 2 cócteles molotov. No hubo daños al personal. Se están precisando los detalles”, redactó el funcionario en Twitter.
En la noche de hoy, 24/9, la Embajada de #Cuba en EEUU fue objeto de un ataque terrorista de un individuo que lanzó 2 cocteles molotov. No hubo daños al personal. Se están precisando los detalles.
Es el segundo ataque violento contra la sede diplomática en Washington, ⤵️
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 25, 2023
De momento, se desconocen más detalles del incidente ocurrido este domingo, pero eso no evitó que el canciller cubano culpara sin prueba alguna a los grupos calificados como “anticubanos” por el régimen de La Habana, los cuales fueron clasificados así por no estar de acuerdo con el gobierno de la Isla y exigir una mejor calidad de vida para sus compatriotas.
desde abril de 2020. En aquella ocasión, un individuo disparó con un fusil de asalto contra la sede.
Los grupos anticubanos acuden al terrorismo al sentir impunidad, algo sobre lo que #Cuba ha alertado a autoridades estadounidenses reiteradamente.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 25, 2023
Pese a las acusaciones del canciller, varios internautas acudieron a la publicación para dejar en claro que no creen en la versión oficialista, asegurando que el mismo régimen debió de haber organizado todo como parte de una estrategia para hacerse pasar por la víctima de la historia.
“¡Este auto-atentado es de un niño de teta al lado de los que hicieron los de la cédula terrorista 26 de Julio, con el Cenicero Andante a la cabeza!”; “Y esperaron que se fueran ustedes para hacerlo. Cambien las estrategias, que esta ya nadie se las cree… fueron ustedes mismos” y “Bruno, eso no te lo cree ni el que te partió el corazón de amor. El asunto está en que, como el puesto a dedo no pudo llamar la atención, entonces crean este acontecimiento para que los cubanos del exilio quedemos mal y ustedes sigan en su llanto perpetuo”, fueron solo algunos de los comentarios.
Ahora, la investigación del incidente deberá ser hecha por las autoridades norteamericanas, en especial la Oficina de Misiones Extranjeras de la Oficina de Seguridad Diplomática del Departamento de Estado de EEUU, encargada de garantizar la seguridad de las embajadas dentro del territorio estadounidense.
Este sería el segundo ataque que se lleva a cabo en la Embajada de Cuba en Washington en los últimos años, con el primero ocurriendo en abril de 2020, cuando un individuo acudió al lugar durante la madrugada y realizó varios disparos contra la sede.
No hubo lesionados en aquella ocasión, y el tirador fue identificado posteriormente como Alexander Alazo, un hombre originario de Cuba con problemas de salud mental.
En aquella ocasión, Rodríguez Parrilla instó a las autoridades a llevar a cabo una investigación sobre el incidente, afirmando que Alazo había asistido a una iglesia en la ciudad del Doral, frecuentada por personas involucradas en la promoción de “la agresión” contra el régimen, esto de nuevo sin presentar pruebas.
