El designado presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, salió en defensa del músico cubano Alexander Abreu luego de que este denunciara haber sido víctima de amenazas de muerte en los últimos días.
“Enfrentaremos la campaña mediática de manipulación y de odio contra intelectuales y artistas cubanos, concebida, dirigida y muy bien pagada desde Estados Unidos. Lo haremos desde la verdad, la identidad y el amor”, comentó Díaz-Canel en su cuenta oficial de Twitter.
Enfrentaremos la campaña mediática de manipulación y de odio contra intelectuales y artistas cubanos, concebida, dirigida y muy bien pagada desde Estados Unidos. Lo haremos desde la verdad, la identidad y el amor. #SomosCuba #SomosContinuidad pic.twitter.com/ZFLUXq4u89
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) September 17, 2020
Asimismo, el ministro de Cultura cubano, Alpidio Alonso, compartió un mensaje, curiosamente muy parecido al de Díaz-Canel, para manifestar su apoyo al director de la popular agrupación cubana Havana D’ Primera.
“Todo mi apoyo y solidaridad con el gran músico Alexander Abreu, víctima de una sucia campaña mediática de manipulación y de odio contra intelectuales y artistas cubanos, concebida, dirigida y muy bien pagada desde los Estados Unidos. Hagamos que prevalezcan la verdad y el amor”, tuiteó Alonso.
Los mensajes de apoyo del gobierno para con Abreu, se da luego de que este informara, que había sido amenazado de muerte por detractores. Esto, a raíz de que el presentador Alex Otaola publicara su número telefónico alegando que el músico había ayudado al reguetonero Jorge Junior, con una multa que le impusieron.
“Lo único que quiero decir es que a todos los que escriben con tanto odio les tengo un corazón lleno de amor y música”, reseñó Abreu.
“Decirle a los que me amenazan de muerte que aquí tengo el pecho, sin problema ninguno. Y decirle a los que me quieren que realmente seguimos haciendo música”, agregó.
Por su parte, el periódico oficialista Granma, también salió en defensa de Abreu, asegurando que “ya es un hecho palpable y recurrente la demonización de nuestros artistas en las redes sociales de Internet”.
“Lo que en determinado momento se disfrazó bajo la égida de una crítica artística, pero dejando entrever un discurso hegemónico y manipulador, hoy se muestra descarnadamente para apropiarse de herramientas de todo tipo que satisfagan, cual desespero canino, una marcada angustia de imposición ideológica”, explica el artículo de Granma.
“Esa conducta puede conducirnos a esbozar -desde un análisis rápido en cuanto al tema- dos tesis muy simples: una puede ser que el contradiscurso desde Cuba se ha perfilado y posicionado en internet por una intelectualidad comprometida con la defensa de la cultura nacional auténtica, y la otra, pero no menos importante, es la refrendación imperial de una política como nunca antes tan hostil hacia todo atisbo cultural cubano y su incidencia en el desarrollo del arte y de su mercado en las dos orillas”, puntualiza el medio.
