EEUU deporta a Cuba a 139 inmigrantes cubanos en vuelo de repatriación
En su primer año, que aún no termina, Trump ya expulsó a un cuarto más de cubanos que Biden en el mismo periodo
Un grupo de 139 cubanos fue devuelto este 20 de noviembre a La Habana por las autoridades de Estados Unidos, en una nueva operación de deportación que confirma la aceleración de estas medidas bajo el gobierno de Donald Trump.
Con esta llegada, son ya 1.370 los migrantes cubanos deportados desde que el presidente asumió el cargo en enero de 2025, una cifra que supera los números reportados durante la administración anterior en el mismo periodo.
El vuelo aterrizó en el aeropuerto internacional José Martí y marcó la undécima operación aérea del año desde territorio estadounidense.
Según el reporte oficial emitido en Cuba, entre los retornados viajaban 109 hombres y 30 mujeres, todos considerados migrantes irregulares por las autoridades estadounidenses.
A su llegada, una de estas personas fue detenida porque se encontraba “en libertad condicional en el momento de abandonar ilegalmente el país”, de acuerdo con la información divulgada.
Con esta operación, aumentan a 52 las devoluciones realizadas hacia la Isla desde distintos países de la región en 2025, para un total de 1.535 cubanos retornados en lo que va del año.
La cifra refleja no solo el incremento de los envíos desde EEUU, sino también la presión migratoria que continúa afectando a la región.
Este vuelo ocurrió apenas dos semanas después del 6 de noviembre, cuando Washington deportó a 232 cubanos, la cifra más alta desde que los vuelos de repatriación se reanudaron en abril de 2023.
Ese operativo había sido interpretado como un anticipo de lo que vendría, pues funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional señalaron entonces a Martí Noticias que el gobierno estaba acelerando las audiencias en tribunales de inmigración para ejecutar órdenes de deportación pendientes.
La administración Trump ha defendido públicamente esta postura. Un portavoz del Departamento de Estado reiteró que “la aplicación de la ley y la política de inmigración de EEUU, incluida la deportación de quienes no tienen fundamento legal para permanecer en el país, es fundamental para defender el estado de derecho”.
En ese sentido, las instituciones migratorias estadounidenses han confirmado la postura trumpista de desconocer un estatus legal de los inmigrantes, indicando que no importa si son legales, ningún latino es bienvenido.
Agregó además que Trump ha sido claro al exigir que “todo país debe aceptar el regreso de sus ciudadanos” cuando otro gobierno decide expulsarlos, y que esta política “no es motivo de debate ni negociación”, incluyendo a los nacionales cubanos.
Sin embargo, funcionarios estadounidenses han señalado que una de las trabas más frecuentes ocurre cuando La Habana se niega a recibir a ciudadanos cubanos con antecedentes penales, incluso si ya cumplieron condena en el país.
Ante esa posición del régimen, Washington ha optado en algunos casos por enviar a esos migrantes a terceros países, entre ellos México y algunas naciones africanas, lo que refleja la dureza del enfoque actual y las tensiones entre ambos gobiernos.
Aumentan deportaciones de cubanos en la administración Trump
El aumento de deportaciones también deja ver el contraste entre administraciones. Entre abril de 2023 y diciembre de 2024, durante el gobierno de Joe Biden, 978 cubanos fueron repatriados por vía aérea desde EEUU.
En menos de un año de mandato, la cifra bajo Trump ya supera ampliamente ese total, alcanzando los 1.370 deportados desde enero de 2025.
Mientras tanto, en Cuba persiste la crisis que ha impulsado a miles de personas a salir del país. Las dificultades económicas, la falta de alimentos, medicamentos y servicios básicos, junto con los prolongados apagones, continúan generando una presión migratoria que el propio régimen no logra contener.
Las repatriaciones, lejos de frenar ese movimiento, muestran la tensión entre un gobierno estadounidense que endurece sus políticas y un gobierno cubano incapaz de garantizar las condiciones mínimas que evitarían que tantos ciudadanos intenten emigrar.



