EEUU elimina cuarta lancha cargada de drogas frente a costas de Venezuela
De acuerdo con las autoridades, en el navío viajaban cuatro personas que perdieron la vida
En un ataque realizado a primeras horas de la mañana de este viernes 3 de octubre, bajo la orden del presidente Donald J. Trump, el gobierno de Estados Unidos destruyó una cuarta lancha cargada de narcóticos frente a las costas de Venezuela.
La operación, llevada a cabo en aguas internacionales en la zona de responsabilidad del Comando Sur de los EEUU (USSOUTHCOM), terminó con la muerte de los cuatro tripulantes a bordo de la embarcación.
El secretario de Guerra de EEUU, Pete Hegseth, indicó que la operación fue justificada debido a la magnitud del cargamento de drogas. Según Hegseth, este envío de narcóticos tenía el potencial de matar entre 25.000 y 50.000 personas si llegara a ser consumido en territorio estadounidense.
Earlier this morning, on President Trump’s orders, I directed a lethal, kinetic strike on a narco-trafficking vessel affiliated with Designated Terrorist Organizations in the USSOUTHCOM area of responsibility. Four male narco-terrorists aboard the vessel were killed in the… pic.twitter.com/QpNPljFcGn
— Secretary of War Pete Hegseth (@SecWar) October 3, 2025
El ataque, el cuarto de este tipo en menos de un mes, se enmarca dentro de la estrategia de la administración Trump para combatir el narcotráfico.
Este esfuerzo busca proteger a los ciudadanos estadounidenses de lo que el gobierno considera una “amenaza directa”. La información de inteligencia confirmaba sin dudas que la embarcación estaba involucrada en el tráfico de drogas, y que sus ocupantes eran considerados narco-terroristas.
Desde la Casa Blanca, la administración de Trump expresó que continuará con las operaciones de este tipo hasta que los ataques contra el pueblo estadounidense cesen.
A pesar de las críticas internacionales, especialmente desde Venezuela y Colombia, que consideran que estos actos constituyen una violación de la ley internacional, Estados Unidos insiste en que la acción es una respuesta defensiva.
Los opositores a la operación sostienen que, en lugar de destruir las embarcaciones en el mar, el gobierno estadounidense podría desplegar marines para interceptar las lanchas y llevar a los involucrados ante la justicia. Sin embargo, EEUU ha defendido su postura, argumentando que la prioridad es la protección de su población y la lucha contra el narcotráfico.
En su plataforma Truth Social, el presidente Trump justificó el ataque señalando el impacto de los narcóticos incautados.
“Esta lancha llevaba suficientes narcóticos para matar entre 25.000 y 50.000 personas”, expresó. Aunque, hasta el momento no se han proporcionado pruebas que respalden esta afirmación ni la identidad de los individuos a bordo.
La administración estadounidense ha declarado que se encuentra en un “conflicto armado no internacional” con los carteles de drogas. Este término, según expertos, podría abrir la puerta a un uso más extensivo de poderes militares en el futuro para enfrentar el tráfico de drogas en la región.
