EEUU ofrece ayuda humanitaria inmediata a Cuba tras el huracán Melissa
De acuerdo con Marco Rubio, EEUU está preparado para ofrecer ayuda de manera directa o a través de socios locales
Este 30 de octubre, el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, anunció a través de X que el gobierno de Washington está dispuesto a brindar asistencia humanitaria a Cuba tras los graves daños causados por el huracán Melissa en la región oriental de la Isla.
Este ofrecimiento llega en un momento crítico, en medio de una creciente crisis de desabastecimiento y precariedad que se ha visto exacerbada por los efectos del ciclón.
Rubio destacó que el gobierno de Estados Unidos se solidariza con el pueblo cubano y está preparado para ofrecer ayuda tanto de manera directa como a través de socios locales que puedan distribuirla de manera más eficaz a las personas necesitadas.
El mensaje de apoyo fue rápidamente compartido por diversos medios internacionales y ha generado una amplia gama de reacciones tanto dentro como fuera de Cuba.
In the wake of Hurricane Melissa’s devastation of eastern Cuba, the Trump Administration stands with the brave Cuban people who continue to struggle to meet basic needs.
The United States is prepared to provide immediate humanitarian assistance directly and via local partners…
— Secretary Marco Rubio (@SecRubio) October 30, 2025
Silencio del gobierno cubano ante la ayuda
Hasta el momento, el gobierno de Cuba no ha emitido una respuesta oficial al ofrecimiento de ayuda.
En lugar de abordar la solicitud de asistencia, el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla ha centrado su atención en la reciente votación en la Asamblea General de la ONU contra el embargo estadounidense, eludiendo cualquier comentario sobre la emergencia humanitaria en la Isla.
Este silencio oficial ha provocado que muchos lo interpreten como una clara preferencia del régimen por mantener su discurso político en torno al embargo por encima de las necesidades urgentes de la población afectada por el desastre natural.
Desastres anteriores y la gestión de la ayuda internacional
En situaciones anteriores de desastres naturales, la gestión de la ayuda internacional en Cuba ha estado marcada por diversas denuncias de opacidad y mala administración.
En 2008, tras el paso de los huracanes Gustav e Ike, la población reportó que parte de la ayuda enviada por otros países fue almacenada y, en algunos casos, vendida en tiendas estatales en lugar de ser entregada gratuitamente a los afectados.
En otras ocasiones, las autoridades cubanas han rechazado la entrada de ayuda de Estados Unidos, prefiriendo que se canalice solo a través de canales oficiales, excluyendo a organizaciones civiles y religiosas que podrían distribuirla de forma más rápida y eficiente.
Condiciones en las regiones afectadas
En las provincias orientales de Cuba como Santiago de Cuba, Granma y Holguín, el paso del huracán Melissa ha dejado miles de viviendas afectadas, severos daños a la infraestructura, y la interrupción de los servicios básicos como electricidad y agua potable.
Las imágenes que circulan por las redes sociales muestran comunidades enteras sin acceso a alimentos ni servicios esenciales. Los residentes de varias regiones denuncian la escasez de ayuda interna y piden con urgencia apoyo para la recuperación.
Distancia política y un gesto humanitario
Este ofrecimiento de ayuda de Estados Unidos, más allá de su dimensión humanitaria, subraya la creciente distancia política entre ambos gobiernos.
Para muchos cubanos en el exilio, la disposición de Washington a asistir a la población cubana contrasta fuertemente con la falta de acción de las autoridades del régimen ante la tragedia.
Este hecho pone de manifiesto, una vez más, las prioridades de los líderes cubanos, quienes parecen más enfocados en la política internacional que en la asistencia inmediata a los ciudadanos afectados por el desastre.
Hasta el cierre de esta nota, las autoridades cubanas no habían emitido una respuesta oficial sobre la propuesta de asistencia.
