Mientras el papa Francisco se habría paso entre la multitud que se encontraba en la Plaza de San Pedro, durante la víspera de Año Nuevo, iba sonriendo y agarrando la mano de simpatizantes. Pero justo cuando el antiguo cardenal argentino se da la vuelta, una mujer lo toma por sorpresa y vislumbró a un papa muy enojado.
Luego de esto, en su mensaje para recibir el 2020, Francisco denunció la violencia contra las mujeres, asegurando que debían ser tratadas con dignidad. También aprovechó para disculparse por su comportamiento, cuando la mujer le agarró la mano y lo atrajo hacia ella, donde el papa reaccionó ante esto, apartando su mano bruscamente antes de apartarse de la multitud. Al respecto dijo que perdió la paciencia y lo llamó un “mal ejemplo”.
