Florida complica más la situación de los camioneros con nueva restricción
La medida se suma a una orden ejecutiva emitida en mayo que ya obligaba a los camioneros a acreditar conocimiento de inglés
El estado de Florida endureció esta semana las reglas para los camioneros comerciales que circulen por sus carreteras, en una ofensiva que mezcla control migratorio y seguridad vial.
Desde ahora, las 23 estaciones de inspección agrícola también funcionarán como puestos de verificación de estatus migratorio y dominio del inglés.
El fiscal general James Uthmeier explicó que los puntos de control estarán respaldados por agentes federales del programa 287(g), en coordinación con ICE.
“Si está aquí ilegalmente o no habla inglés, no tiene por qué conducir vehículos comerciales grandes en las carreteras de Florida”, dijo.
Además, insistió en que el estado usará todas las vías legales para impedir que indocumentados o personas sin preparación adecuada manejen vehículos pesados.
La medida se suma a una orden ejecutiva emitida en mayo que ya obligaba a los camioneros a acreditar conocimiento de inglés.
El comisionado de Agricultura, Wilton Simpson, señaló que se incorporarán escáneres de rayos X y más carriles de acceso para garantizar inspecciones exhaustivas.
“Convertiremos estas estaciones en fortalezas de control migratorio y de seguridad vial”, afirmó.
El trasfondo político es evidente. Florida no solo presiona dentro de sus límites, también pidió al Gobierno federal retirar fondos y frenar la emisión de licencias comerciales en California y Washington, estados que, según Uthmeier, permitieron conducir a indocumentados sin cumplir los requisitos.
En una carta, responsabilizó directamente a esa política de un accidente fatal ocurrido el 12 de agosto en la Florida Turnpike, en el que murieron tres personas.
El caso involucró a Harjinder Singh, inmigrante indio de 28 años con licencias emitidas en California y Washington, quien realizó un giro en U indebido con un tráiler. Las pesquisas confirmaron que no hablaba inglés ni reconocía señales viales básicas.
El Gobierno de Donald Trump respaldó de inmediato la ofensiva, suspendiendo las visas de trabajo para camioneros comerciales en todo el país.
La medida fortalece la estrategia republicana de línea dura contra la migración, en la que Florida se ha convertido en laboratorio de políticas restrictivas.
Detrás del discurso de seguridad, críticos apuntan que la aplicación de estas normas afecta sobre todo a trabajadores migrantes latinos y refuerza un clima de exclusión que se replica en otras áreas de la vida laboral.



