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Incendios forestales fuera de control han dejado más de 100 muertes en Chile

El país está lidiando con más de 160 incendios activos en 10 regiones de su territorio, los cuales han consumido miles de hectáreas de bosque

Chile se encuentra atravesando uno de sus momentos más difíciles, pues está lidiando con unos 165 incendios forestales activos en 10 de sus regiones. Una de las más afectadas es la costera Valparaíso, donde el fuego que inició el pasado viernes alcanzó los suburbios de la ciudad de Viña del Mar y provocó la muerte de 112 personas.

De acuerdo con la agencia de noticias EFE, esta es considerada como la mayor tragedia desde el terremoto que sacudió a la nación sudamericana en 2010.

Cifras oficiales compartidas por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) señalan que, solo en esa región costera, más de 8.500 hectáreas han sido consumidas por las llamas.

De igual manera, se calcula que alrededor de 3.000 viviendas han sufrido daños estructurales graves a causa del fuego, mientras que un número similar han sido afectadas en menor medida.

Los incendios también han acabado con unas 1.500 hectáreas en las comunas de Quilpué y Villa Alemana, epicentros de los incendios.

Los incendios han cobrado fuerza a causa de los fuertes vientos y la temporada de calor que azota al país durante esta época del año, extendiéndose por varias áreas forestales de la región metropolitana, incluyendo la capital de la nación.

El Senapred indicó que existe un gran foco de incendios en la comuna de Alhué, donde unas 467 hectáreas aún están en peligro de ser consumidas por uno de estos siniestros que inició el domingo 4 de febrero.

Un poco más al sur, la región de O’Higgins, unas 4.235 hectáreas han sido consumidas por un incendio que se desató en la zona de La Estrella, el cual, aunque permanece activo, ya fue controlado por los bomberos.

En la comuna de Navidad, varias unidades de bomberos permanecen luchando para poder controlar distintos incendios de baja intensidad que están afectando unas 1.000 hectáreas de bosque y han destruido 27 viviendas.

La central región de La Araucanía, que fue una de las más afectadas por incendios similares ocurridos el año pasado, presenta dos focos activos en las comunas de Lonquimay y Galvarino, que amenazan 1.400 y 440 hectáreas de bosque, respectivamente.

En total, unos 1.400 bomberos, 1.300 militares y un número no especificado de voluntarios se encuentran desplegados por todo el país para combatir las llamas. Para ello utilizan la ayuda de 31 helicópteros y aviones con capacidad de descarga.

En los sectores más afectados, como el de Valparaíso, se ha implementado un toque de queda para poder liberar todas las rutas posibles, esto para que los vehículos de emergencia puedan circular con mayor facilidad.

Por su parte, Gabriel Boric, presidente de Chile, decretó el estado de excepción por catástrofe para movilizar la mayor cantidad de recursos posibles para combatir las llamas.

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