Joven de la Isla desaparece en México tras salir a la playa con otro cubano
Ante el riesgo de una posible situación delictiva, las autoridades mexicanas han activado una alerta
Una joven cubana, identificada como Yudainis Cachimay Paz, de 25 años, se encuentra desaparecida desde el pasado 23 de agosto en el estado mexicano de Chiapas.
La joven, quien viajaba en compañía de un hombre, Yordanis Cañimi Paz, originario también de la Isla, no ha sido vista desde que este le ofreció llevarla a la playa.
Ante el riesgo de una posible situación delictiva, las autoridades mexicanas han activado una alerta para su localización.
La Fiscalía Contra la Desaparición Forzada de Personas y la Cometida por Particulares ha tomado cartas en el asunto, con el fin de encontrar a Yudainis sana y salva.
Según información proporcionada por una amiga cercana de la joven, el hombre involucrado, Cañimi Paz, la invitó a la playa antes de que desapareciera sin dejar rastro. Ante la preocupación de sus conocidos, se presentó la denuncia ante las autoridades.
La joven, de complexión delgada, mide 1.67 metros y pesa aproximadamente 60 kilos. Posee cabello negro y largo, ojos grandes de color negro, una nariz chata y una boca grande.
Entre sus señas particulares se encuentran varios tatuajes, como uno en el lado izquierdo de su pecho, otro en el hombro, una mandala en el centro del pecho, una flor en la pierna izquierda y un tatuaje con la palabra “Sueño” en la pierna derecha.
Adicionalmente, se informó que esta suele llevar un piercing en la nariz y se le ha visto con una sudadera negra con el logo de Coca Cola.
Chiapas, un punto crítico para migrantes
Chiapas se ha consolidado como uno de los puntos más importantes de entrada de migrantes provenientes de Centroamérica y el Caribe. Pese a esto, las condiciones de vida en esta región son extremadamente precarias.
Migrantes que llegan en busca de regularizar su situación migratoria se enfrentan a largos y complejos procesos burocráticos, principalmente ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), lo que los obliga a vivir en una situación de vulnerabilidad.
Debido a su situación de incertidumbre, los migrantes se convierten en blancos fáciles de explotación laboral, extorsión y violencia.
Luis Abarca, del Comité de Derechos Humanos, ha denunciado la falta de respuestas por parte de las autoridades y la falta de acceso a la protección adecuada, incluso cuando las personas son víctimas de violencia.
Dentro de este panorama, las mujeres migrantes son especialmente vulnerables a la trata de personas y la explotación sexual.
“Las mujeres migrantes están expuestas a ser reclutadas por redes criminales, lo que agrava aún más su vulnerabilidad”, señaló el activista.
