La Habana: joven muere bajo extrañas circunstancias en el Servicio Militar
La familia del muchacho ha exigido transparencia y justicia tras el silencio de las autoridades
Un joven cubano de 18 años, identificado como Samuel Sampedro, murió recientemente mientras realizaba su Servicio Militar Activo en el Combinado del Este, una de las unidades militares más grandes de La Habana.
La noticia fue divulgada este fin de semana por el periodista Mario J. Pentón, quien informó que fuentes cercanas a la familia confirmaron el fallecimiento bajo circunstancias misteriosas. Hasta el momento, las autoridades militares no han ofrecido detalles oficiales sobre lo sucedido.
La familia de Sampedro ha exigido transparencia y justicia tras el silencio de las autoridades. Este caso se suma a otros recientes que han puesto en evidencia la falta de claridad en torno a las muertes de jóvenes reclutas en el Servicio Militar cubano.
Los familiares del joven siguen esperando una explicación formal sobre las causas de su deceso y sobre el manejo de su cuerpo.
Casos similares en el Servicio Militar
En agosto de este año, otro joven, Antonio Rassi, de 18 años, murió en la Unidad Militar El Calvario, también en La Habana. Según versiones no oficiales, Rassi habría perdido la vida tras dispararse con un arma de fuego durante su servicio.
Este caso, al igual que el de Sampedro, no recibió un pronunciamiento oficial, y las autoridades militares no ofrecieron detalles claros sobre las circunstancias.
Solo dos días después de la muerte de Rassi, otro joven, Lázaro Daniel Monteros, de 19 años, falleció en la unidad militar de El Morro.
La familia de Monteros denunció que recibió tres versiones diferentes sobre lo sucedido, sin que se aclarara la causa real de su muerte. Estas muertes han generado gran indignación en la sociedad cubana, tanto dentro como fuera de la Isla, donde las denuncias por la falta de transparencia en el manejo de los casos se han intensificado.
El Combinado del Este, donde Samuel Sampedro cumplía su servicio, ha sido objeto de denuncias previas debido a las condiciones de disciplina y control interno. A pesar de ser uno de los centros militares más importantes de la capital, los medios estatales no han reportado el incidente ni han mencionado el nombre del joven fallecido.
Hasta ahora, el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (Minfar) no ha respondido a las demandas de la familia ni ha hecho ninguna declaración oficial sobre el caso. La familia de Sampedro continúa exigiendo una investigación independiente y respuestas claras sobre las causas de la muerte del joven.
Silencio de las autoridades
El Servicio Militar obligatorio, vigente en Cuba desde 1963, sigue siendo un tema polémico. Organizaciones de derechos humanos y activistas en el exilio han denunciado de forma constante abusos, maltratos y la falta de supervisión sobre los reclutas, lo que ha alimentado la indignación de la sociedad cubana ante los recientes sucesos.
Los casos recientes de Sampedro, Rassi y Monteros han llevado a muchos a exigir una mayor rendición de cuentas por parte de las autoridades militares cubanas.
La falta de explicaciones oficiales en estos casos ha intensificado el malestar social y ha alimentado las preocupaciones sobre el trato que reciben los jóvenes que cumplen con el servicio militar obligatorio en el país.



