Minsap reporta 55 muertes y 43 pacientes graves en la Isla por arbovirosis
La actualización señala que la mayoría de las víctimas mortales son menores de 18 años
La viceministra de Salud Pública de Cuba, Carilda Peña García, informó recientemente que el país ha registrado un total de 55 fallecimientos y 43 pacientes graves debido a la circulación de arbovirosis, principalmente dengue y chikungunya.
En una actualización televisiva sobre la situación epidemiológica, Peña García destacó que la mayoría de las víctimas mortales son menores de 18 años, subrayando que 18 de los decesos se deben al dengue y el resto al chikungunya.
Preocupante aumento de pacientes graves
En cuanto a la cantidad de personas en estado grave, la funcionaria confirmó que actualmente hay 43 pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos, lo que representa un aumento de cinco casos en comparación con el día anterior.
El número de pacientes más jóvenes, afectados por estas enfermedades virales, continúa siendo alarmante.
El régimen cubano confirma 55 fallecidos y 43 pacientes en estado grave a causa de arbovirosis en #Cuba.
De las muertes registradas, 18 fueron por dengue y el resto por chikungunya.
Las autoridades reconocieron que la mayoría de las víctimas son menores de edad. pic.twitter.com/n9mioGyftf
— Mag Jorge Castro🇨🇺 (@MagJorgeCastro) December 20, 2025
Control del brote y medidas preventivas
Peña García explicó que, a pesar de los esfuerzos por controlar la propagación del virus, el índice de incidencia del dengue ha sido de 8,32, una cifra que, aunque menor a la del año pasado (12,31), sigue siendo preocupante.
La transmisión activa del virus continúa afectando a todas las provincias, incluyendo Santiago de Cuba, Holguín, Camagüey, La Habana y Villa Clara, donde se reporta un aumento de casos febriles, hospitalizaciones pediátricas y complicaciones fatales asociadas.
Limitaciones en el sistema de salud
Mientras el Ministerio de Salud se concentra en el control del mosquito Aedes aegypti, las autoridades locales enfrentan una escasez de recursos como insecticidas y reactivos diagnósticos.
Médicos consultados de forma independiente han señalado que estas carencias, junto con los problemas estructurales en los hospitales, han dificultado una respuesta más eficaz ante el brote.
De igual manera, se han denunciado casos de corrupción en la campaña de fumigación, con varias personas asegurando que los trabajadores de La Habana exigen pagos ilegales por realizar un trabajo que, de acuerdo con el régimen, debería ser completamente gratis.
