Nuevo conteo oficial: Melissa dañó más de 45.000 viviendas en Cuba
Esto ha provocado una grave crisis habitacional en varias localidades mientras los materiales llegan
El huracán Melissa, que azotó las provincias orientales de Cuba el pasado miércoles, ha dejado un saldo devastador. Según nuevos datos preliminares emitidos por la Presidencia, 45.282 viviendas resultaron dañadas, siendo los techos los principales afectados.
Esto ha provocado una grave crisis habitacional en varias localidades, donde los residentes se enfrentan a condiciones precarias mientras esperan la llegada de materiales de reconstrucción.
Además de los daños en las viviendas, el huracán también causó una afectación significativa en el sector salud. Según los informes oficiales, 461 instalaciones de salud, entre hospitales, policlínicas y farmacias, fueron dañadas.
A pesar de los esfuerzos por mantener la atención médica, muchas de estas instalaciones siguen en proceso de reparación. Las autoridades informan que la atención médica continúa brindándose en los centros de evacuación, pero la recuperación total podría demorar más de lo esperado.
Impacto en el sistema educativo
El sector educativo también ha sufrido daños considerables, con 1.552 centros escolares afectados. Más de 14.000 personas continúan refugiadas en estas instalaciones, y se prevé un regreso gradual a las clases, dependiendo de las condiciones en cada provincia.
La ministra de Educación, Naima Trujillo Barreto, ha confirmado que la reanudación de clases se llevará a cabo solo cuando se logren las condiciones mínimas de seguridad y estabilidad.
Por otro lado, el Consejo de Defensa Nacional, encabezado por Miguel Díaz-Canel, ha abordado la recuperación de los servicios básicos, como el agua y la electricidad.
Mientras que algunas zonas, como Las Tunas, han logrado un 94,5% de recuperación eléctrica, otras, como Holguín y Granma, apenas han logrado restablecer el 40,5% y el 50,4% de su energía eléctrica, respectivamente. En Santiago de Cuba, muchos circuitos ya están operativos, pero aún se espera la conexión final de Renté.
Malestar ciudadano
A pesar de los esfuerzos por recuperar los servicios, la frustración es evidente entre los ciudadanos afectados. En las redes sociales, numerosos residentes expresan su malestar por la lentitud de la respuesta oficial y la falta de recursos.
Especialmente en áreas más remotas, como Jamal, en Baracoa, Guantánamo, la ayuda aún no ha llegado, y los ciudadanos denuncian la falta de transparencia en los esfuerzos de recuperación.
La promesa de restablecer rápidamente el suministro eléctrico ha quedado empañada por los apagones interminables.
Esto ha generado malestar y ha incrementado las quejas en localidades como Matanzas, donde los residentes denuncian la falta de respuesta clara sobre los apagones y la escasez de materiales esenciales como las tejas para las viviendas afectadas.
En particular, los ciudadanos Isabel Rodríguez y Adonis Valdés lamentan las demoras en la entrega de materiales de construcción, lo que ha impedido que muchas familias puedan reparar sus viviendas. En áreas como Jamal, en Baracoa, los residentes siguen esperando la llegada de las tejas prometidas, lo que ha agravado la situación y aumentado el descontento generalizado.



