Paralizan exploración de pozo petrolero en Cuba por conflictos entre inversionistas
Este retraso se suma a una serie de contratiempos que Melbana ha enfrentado en su proyecto en Cuba
La exploración de un nuevo pozo petrolero en Cuba se ha visto paralizada debido a un conflicto financiero entre los inversionistas extranjeros involucrados en el proyecto.
La firma australiana Melbana Energy Limited, que lidera el desarrollo del Bloque 9, en la costa norte de la Isla, informó que la perforación se ha pospuesto debido a la falta de pagos por parte de Sonangol, la principal petrolera del proyecto.
Conflicto financiero detiene los trabajos de perforación
Melbana Energy había movilizado la plataforma de perforación el 22 de noviembre con la intención de comenzar los trabajos en el pozo Amistad-11. Aunque los permisos para la excavación fueron aprobados el 24 de noviembre, la falta de fondos por parte de Sonangol impidió continuar con las labores de perforación.
La petrolera angolana, que posee el 70% de la participación en el Bloque 9, había acordado financiar la perforación para principios de 2025, pero recientemente comunicó que no podría cumplir con el compromiso de pagos durante el año fiscal, lo que generó un impasse en las operaciones.
Impacto en la industria petrolera
Este retraso se suma a una serie de contratiempos que Melbana ha enfrentado en su proyecto en Cuba. En noviembre, la firma australiana ya había anunciado que no había encontrado petróleo en otro pozo exploratorio, el Amistad-2.
De igual manera, los problemas logísticos derivados de los apagones masivos y daños causados por huracanes han complicado el desarrollo de la infraestructura necesaria para la exportación de crudo.
Según un informe de McDaniel & Associates, el Bloque 9 tiene reservas potenciales de 15.700 millones de barriles de petróleo, pero Melbana solo ha logrado almacenar 33.000 barriles en más de cinco años de operaciones. Esto ha generado dudas sobre la viabilidad a corto plazo del proyecto, en un contexto de crisis energética creciente en la isla.
El futuro del proyecto depende de la resolución del conflicto entre los inversionistas. Melbana ha emitido un aviso de incumplimiento a Sonangol, otorgando un plazo de 60 días para resolver la situación.
Si la falta de pagos persiste, Melbana podría tomar medidas para que Sonangol ceda su participación en el Bloque 9, lo que podría reconfigurar el panorama de la explotación petrolera en Cuba y alterar la relación entre las partes involucradas.
