Régimen modifica el sistema salarial de las empresas estatales

El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) de Cuba ha promulgado el Decreto 138, una medida que modificará la estructura salarial en las empresas estatales del país.

Esta normativa, publicada en la Gaceta Oficial, entrará en vigor en 2026 y representa un avance en la descentralización de la gestión del capital humano en el sector público cubano.

Descentralización de la autoridad salarial

El Decreto 138 permite a las empresas estatales la libertad de gestionar su propio sistema salarial, sin la intervención directa de los ministerios correspondientes.

Las empresas podrán diseñar su propia escala salarial, así como sus métodos de pago, lo que se considera un paso hacia una mayor flexibilidad y autonomía en la gestión de los recursos humanos.

Guillermo Sarmiento Cabañas, director de Organización del Trabajo del MTSS, destacó que esta reforma tiene como objetivo principal aumentar la eficiencia y productividad dentro del sistema empresarial cubano.

Según Sarmiento, este cambio viene acompañado de un modelo piloto implementado desde 2023 en un grupo selecto de empresas, las cuales representan el 45% del sistema estatal y generan el 64% de las ventas y el 71% de las utilidades del sector.

Indicadores de rendimiento y un sistema salarial más equitativo

Una de las características más destacadas del Decreto 138 es que las empresas deberán cumplir con indicadores de rendimiento para garantizar que el aumento de la productividad no afecte negativamente el aporte fiscal del Estado. Esta medida busca equilibrar la autonomía empresarial con el bienestar económico del país.

El decreto también establece cinco principios fundamentales que guiarán la nueva organización salarial: igualdad, diferenciación, distribución, dinámica y protección mínima.

En particular, la protección mínima garantiza que ningún salario sea inferior al salario mínimo nacional o al salario base que el trabajador percibía antes de la implementación del nuevo sistema.

Sistemas de pago por rendimiento

El nuevo sistema salarial introduce un modelo de pago por rendimiento, en el que al menos el 30% del fondo salarial de cada empresa estará vinculado a los resultados alcanzados por cada trabajador.

Este sistema busca fomentar una mayor responsabilidad empresarial y mejorar los resultados financieros del país, incentivando tanto el rendimiento individual como colectivo.

Tratamiento especial para sectores clave y nuevas empresas

El Decreto 138 también contempla un tratamiento especial para empresas de sectores estratégicos, como los servicios públicos y las dedicadas a la exportación.

A las primeras, como la Empresa Eléctrica, se les asignará un fondo salarial determinado por el Estado, ya que sus funciones sociales limitan la posibilidad de generar grandes utilidades.

Las empresas de alto valor añadido, por su parte, deberán aumentar su productividad y su aporte fiscal al presupuesto.

Adicionalmente, las empresas de nueva creación podrán diseñar su propia organización salarial, un beneficio que antes estaba restringido.

Las Unidades Empresariales de Base (UEB) que presenten buenos resultados podrán obtener la facultad de aprobar su propia organización salarial, incluso si la empresa matriz no cumple con los requisitos establecidos.