Reportes señalan que Raúl Castro estaría hospitalizado en estado crítico

Raúl Castro, de 94 años, fue ingresado de urgencia el martes 23 de septiembre en el Hospital CIMEQ, en La Habana, tras un cuadro de salud crítico. El traslado, en camilla y a gran velocidad, fue reportado por la página de Facebook Periódico Patria 1892 y confirmado a este medio por una fuente cercana.

La operación habría activado un fuerte anillo de seguridad alrededor del centro médico. No hay confirmación oficial.

Operativo en CIMEQ y hermetismo oficial

La Unidad de Apoyo Vital del CIMEQ recibió al exmandatario bajo estricta discreción. El despliegue en el hospital del oeste de la capital, tradicionalmente utilizado por la cúpula del poder para tratar afecciones graves, refuerza la relevancia del episodio. En ese centro fue atendido Fidel Castro en sus últimos años.

Una fuente consultada por el medio independiente Periódico Cubano aseguró que el estado de Raúl Castro es grave. De igual manera, una fuente consultada por dicho medio indicó que se iniciaron labores de limpieza y mantenimiento en el Mausoleo del Segundo Frente Oriental Frank País, en Santiago de Cuba, cementerio en el cual reposan los restos de Vilma Espín, esposa del exgobernante.

Movimientos en el mausoleo del Segundo Frente

El mausoleo, de alto valor simbólico para el régimen, ha sido señalado como el lugar escogido para la futura sepultura de Raúl Castro. Los trabajos de las últimas horas en ese sitio aportan peso a las versiones que advierten sobre un posible desenlace cercano.

Hasta ahora, las autoridades cubanas guardan silencio. Este manejo contrasta con la magnitud del personaje y sigue la pauta de prudencia aplicada por el Gobierno ante noticias sobre figuras históricas de la Revolución.

En ocasiones previas circularon rumores sobre su salud sin validación oficial; la coincidencia entre reportes en redes y movimientos en el mausoleo distingue el episodio de este martes.

Implicaciones políticas inmediatas

Raúl Castro asumió el mando tras la enfermedad de su hermano Fidel en 2006 y fue presidente hasta 2018. Incluso tras su retiro formal, conservó influencia decisiva en el Partido Comunista y en las Fuerzas Armadas. Su liderazgo lo mantuvo como actor clave del sistema político.

La posibilidad de su fallecimiento mantiene en alerta a los altos mandos. Un escenario de ese tipo forzaría reacomodos en la cúpula militar y partidista, en medio de una crisis económica y social marcada por la escasez y la inestabilidad del suministro básico.

El CIMEQ, principal centro asistencial de la élite, concentra la atención mientras persiste el hermetismo. No se han divulgado partes médicos ni se ha anunciado comparecencia oficial. La expectativa se centra en la eventual confirmación o desmentido de los reportes.

De confirmarse un desenlace fatal, se cerraría el ciclo de la generación histórica que protagonizó 1959. También se abriría una etapa de transición dentro de la continuidad del régimen, con efectos en la correlación de fuerzas internas y en la gobernabilidad a corto plazo.

El seguimiento a las próximas horas será determinante para aclarar el estado del exmandatario y el alcance político de los movimientos detectados en Santiago de Cuba. Por el momento, el país permanece a la espera de una comunicación oficial.