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Roban balón de oxígeno en hospital de Granma

La noticia subraya la grave escasez de recursos médicos que se vive en Cuba

La profunda crisis que enfrenta el sistema de salud cubano quedó nuevamente expuesta el jueves, cuando se dio a conocer un insólito incidente en el Hospital Fe del Valle, ubicado en el municipio Manzanillo, en la provincia de Granma, donde un cilindro de oxígeno, esencial para la atención médica de los pacientes, fue robado.

La noticia fue compartida en redes por un perfil oficialista, el cual no compartió detalles del robo, aunque recalcó que el balón fue restituido luego en una ceremonia por agentes de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR).

Este acto de propaganda fue presentado como un “éxito” de las autoridades, quienes entregaron el balón de oxígeno a la entidad de salud, permitiendo que el mismo pudiera ser utilizado nuevamente.

No se ofrecieron detalles sobre los responsables del robo ni sobre las condiciones del operativo, y aunque la noticia fue compartida como un “logro más de la Revolución”, esta solo subraya la grave escasez de recursos médicos en Cuba.

El balón de oxígeno, un elemento fundamental para salvar vidas, se convierte en un bien de codicia en medio de la crisis económica y sanitaria que afecta al país.

Escasez crítica de recursos médicos

Este incidente no es aislado. En los últimos meses, Cuba ha enfrentado una aguda crisis hospitalaria, exacerbada por la falta de oxígeno medicinal, medicamentos y electricidad.

La situación se agrava aún más por el desmantelamiento de los sistemas de seguridad en los hospitales, que son incapaces de evitar el robo de equipos médicos fundamentales.

En un contexto de penurias y privatización de recursos, la noticia fue celebrada como una victoria propagandística por el gobierno cubano. En su informe, se destacó el agradecimiento de los trabajadores y pacientes del hospital hacia los oficiales de la PNR, quienes realizaron la entrega del equipo.

Sin embargo, este gesto de recuperación de un balón de oxígeno pone de manifiesto una realidad mucho más grave: la desesperante escasez de recursos en el sistema de salud cubano.

El hecho de que un elemento esencial para salvar vidas pueda ser robado sin que las autoridades ofrezcan detalles sobre el operativo refleja el colapso del sistema sanitario y la desconfianza de la población en las instituciones.

Robo de medicamentos en otros hospitales

Este no es el primer caso que sale a la luz sobre la falta de control en los centros hospitalarios de Cuba. En julio de este año, las autoridades detuvieron a una enfermera del Hospital Celia Sánchez Manduley, en la misma provincia de Granma, después de que fuera sorprendida robando medicamentos e insumos médicos durante su turno de guardia.

Este tipo de incidentes pone en evidencia la descomposición del sistema de salud, donde los mismos trabajadores que deberían estar cuidando la vida de los pacientes se ven obligados a recurrir al robo debido a las penurias que enfrentan en su día a día.

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