La granada es una fruta asiática que presenta innumerables beneficios para nuestra salud y su alcance en la cura de enfermedades ha sido ampliamente reconocido desde la antigüedad.
En los últimos tiempos se han realizado numerosas investigaciones que involucran a esta fruta, muchas de ellas encaminadas a comprobar científicamente las propiedades de la misma en la salud humana.
La granada aporta gran cantidad de vitaminas y minerales como por ejemplo: las vitaminas (A, B, C, D, E y K) y minerales como: calcio, fósforo, hierro, manganeso, sodio, potasio, entre otros.
También posee otros componentes valiosos como: flavonoides, elagitaninos, ácido elágico, entre otros, que tienen una fuerte actividad antioxidante.
Evidencias recientes sugieren que comer la fruta, incluso su corteza, tiene una marcada implicación terapéutica en la gestión de salud, así como en frenar el desarrollo de algunas enfermedades.
Pero lo que hoy les queremos mostrar es otra propiedad de la granada y que tiene que ver con el consumo de sus semillas para reducir el peso corporal.
Ante todo, aclaremos que el resultado no es mágico, por lo que debemos unir al consumo diario de las semillas, una dieta balanceada y una rutina de ejercicios.
Las semillas de granada son bajas en calorías y contienen poca azúcar, por lo que son muy buenas para adelgazar. A su vez aceleran el metabolismo y la regulación del tránsito intestinal, evitando que la grasa se estanque en tu cuerpo.
Entre otros usos medicinales, tenemos:
- Reducción de los niveles del colesterol y potencia diurética gracias a su efecto antioxidante.
- Reducción del estrés al ingerirla, por aumento de energía al consumirla en las mañanas.
- Tratamiento de pólipos nasales a través del jugo de la fruta.
- Reduce el envejecimiento por sus propiedades antioxidantes.
- Cicatrización de úlceras a través de la corteza de la fruta.
- Evita el estreñimiento a través del jugo o la fruta entera.
¿Cómo ingerir las semillas?
Debes lavar la fruta, picarla en dos mitades y luego retiras las semillas con una cuchara. Las puedes consumir solas o en ensaladas.
Otra opción es:
En forma de jugo: Para ello extrae las semillas, añádelas a la licuadora y licua por unos segundos. No deben excederse en el tiempo, pues luego tendrán un sabor muy ácido. Y listo, podrás cumplir con tu rutina diaria de semillas de granada para perder peso.
