Vecinos protestan en Guantánamo por falta de electricidad tras el huracán Melissa
“Estamos desesperados. No tenemos luz, no tenemos agua, y nadie nos da respuesta“, señalan los afectados
Residentes del reparto Ho Chi Minh, ubicado en la ciudad de Guantánamo, salieron el viernes a las calles para exigir respuestas inmediatas ante la grave falta de agua potable y electricidad que sufre la comunidad desde el paso del huracán Melissa.
La manifestación, que reunió alrededor de un centenar de personas, criticó la ausencia de servicios básicos y la escasez de alimentos, además de la falta de información oficial sobre la recuperación.
Vecinos exigen respuestas
Los habitantes del barrio se mostraron desesperados ante la carencia de servicios fundamentales, especialmente en un contexto de altas temperaturas.
“Estamos desesperados. No tenemos luz, no tenemos agua, y nadie nos da respuesta. Aquí hay niños y ancianos que no pueden seguir así”, expresó una vecina que pidió anonimato en declaraciones a Martí Noticias.
La manifestación tuvo lugar en las calles Moncada y 12 Sur, frente a la bodega del barrio. Los manifestantes increparon a funcionarios locales y trabajadores de la empresa eléctrica, mientras denunciaban el desinterés de las autoridades.
“Esto es una dictadura, lo sabe el mundo entero. No somos perros, somos personas”, gritaban los asistentes. Además, se mencionó que las donaciones destinadas a los afectados por el huracán estaban siendo desviadas.
“Hay donaciones ahí que se las quieren coger”, dijeron.
Tensión y falta de soluciones inmediatas
El malestar de los vecinos se intensificó tras la distribución de alimentos, pues los afectados consideraron que la ayuda no cubría sus necesidades básicas.
“Solo llegaron dos libras de arroz a cada núcleo familiar”, informó el activista local Miguel Ángel López Herrera.
“La gente no aguanta más. Demasiadas enfermedades, sin medicamentos. No hay casa que no haya sido afectada por el huracán, muchas sin techo”, añadió López Herrera.
En redes sociales circuló un video del momento en que los manifestantes exigían una respuesta efectiva a la crisis humanitaria.
A pesar de la intervención de la policía y agentes de la Seguridad del Estado, que lograron dispersar la protesta, la tensión sigue siendo alta en la zona. No se reportaron detenciones, pero fuentes locales advierten que la situación sigue siendo crítica y que la restauración de los servicios es incierta.
La crisis se extiende a toda la región
Este panorama de crisis en Guantánamo forma parte de un cuadro más amplio en las provincias del Oriente de Cuba, afectadas por las devastadoras consecuencias del huracán Melissa.
Según informes locales, el huracán causó inundaciones y graves daños en viviendas, carreteras, redes eléctricas y de telecomunicaciones en Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma y Holguín.
En la capital provincial, los residentes aseguran que las brigadas de reparación y los equipos de emergencia no han llegado a todos los puntos críticos, mientras que los cortes de electricidad y la escasez de alimentos siguen empeorando la situación.
Hasta el cierre de esta edición, no había declaraciones oficiales sobre los reclamos de los vecinos ni información clara sobre el estado de las redes eléctricas y de agua en Guantánamo.



