Al menos tres muertos y cuatro desaparecidos tras explosión en una fábrica de Chocolate de Pennsylvania
Una explosión registrada este sábado 25 de marzo en una fábrica de Chocolate de Pennsylvania, Estado Unidos, dejó al menos a tres personas muertas y a otras cuatro desaparecidas.
De acuerdo con el medio NBC News, los equipos de rescate continuaron sus labores durante horas después de la explosión, tiempo durante el cual lograron sacar a una persona con vida de entre los escombros.
La explosión ocurrió alrededor de las 5:00 p.m. en fábrica de la empresa R.M. Palmer Co., ubicada en el municipio de West Reading, a unas 60 millas al noroeste de Philadelphia.
Al respecto, el jefe de la policía del distrito de West Reading, Wayne Holben, el número inicial de fallecidos había sido establecido en dos, pero durante las labores de rescate se descubrió un tercer cadáver.
Por su parte, Chad Moyer, jefe de bomberos del distrito, indicó que cuatro personas continuaban desaparecidas, por lo que los equipos de emergencia iban a seguir buscando entre los escombros, todo mientras expertos analizaban el lugar para determinar el origen de la explosión.
Moyer reconoció que era poco probable encontrar más sobrevivientes, pues la explosión fue muy violenta y ya habían pasado varias horas desde que ocurrió el accidente, sin embargo, se iban a enfocar en “dar cuenta de todas las personas desaparecidas y reunirlas con sus seres queridos”.
El jefe de policía agregó por su parte que el rescate de una persona de entre los escombros dio esperanzas de que podían encontrar a más personas, por lo que las autoridades trabajan sin descansar.
Según Holben, en estas operaciones están participando perros de rescate y equipos especializados en detectar señales de vida a la hora de retirar los escombros.
El citado medio indicó que la explosión destruyó un edificio y daño considerablemente otro colindante, mientras que las autoridades cerraron las carreteras cercanas a los hechos hasta el próximo lunes 27 de marzo, a las 8:00 a.m.
La alcaldesa del lugar, Samantha Kaag, confirmó que la fábrica quedó muy dañada, afirmando que el sitio había quedado bastante “arrasado”.
“El edificio de enfrente, con la iglesia y los apartamentos, la explosión fue tan grande que movió ese edificio cuatro pies hacia adelante”, agregó.
Mediante un comunicado, la empresa aseguró estar devastada por lo ocurrido, y se iba a concentrar en apoyar a las familias de aquellos empleados afectados por la explosión.
