El Volkswagen Beetle fue uno de los modelos más exitosos de la marca, y continúa siendo uno de los más emblemáticos, especialmente en Latinoamérica, donde en países como México fue uno de los automóviles favoritos de los ciudadanos, pero con los años la demanda siguió decayendo, hasta que la compañía decidió descontinuarlo.
El anuncio oficial fue hecho en 2003, cuando la compañía alemana decidió finiquitar la producción del modelo en México, donde era conocido como “Vocho”, y por muchos años fue el modelo más popular entre los mexicanos.
Sin embargo, algunos historiadores consideran al ahora presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como el posible responsable de su desaparición oficial en el país.
Sí bien, es cierto que el “Volcho”, había perdido popularidad, – e incluso fue desplazado por el Chevy Pop de General Motors como el auto mejor vendido en 1997 -, el pequeño auto seguía siendo el preferido por los taxistas mexicanos, hasta que las reformas de AMLO, entonces Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, provocaron su desuso en este sector.
Ver esta publicación en Instagram
En 2002, López Obrador presentó un decreto que prohibía la concesión de permisos para el transporte público, en modalidad de taxis, a automóviles de dos puertas; esto provocó que los taxistas de la Ciudad de México cambiarán al antiguo favorito por el Nissan Tsuru (tercera generación Nissan Sentra).
Finalmente, en junio del año 2003, fue presentado el Volkswagen Sedán Última Edición, para conmemorar los días de popularidad del Beetle en tierras mexicanas.
2, 999 unidades de esta edición final, fueron distribuidas en los concesionarios de Volkswagen de todo México. El último Beetle, número de serie 21,529,464, salió de la fábrica en con destino al Estado de Veracruz, mientras se escuchaba la canción, “Las Golondrinas”.
Finalmente, el último “Volcho” fue enviado a Wolfburg, Alemania, para ser exhibido en el Museo de Volkswagen.
