Avería en tubería de gas provoca suspensión del servicio en La Habana
La reparación de la tubería causará una “parada total” en la planta de producción #2, lo que afectará directamente a dos municipios capitalinos
La grave crisis energética que afecta a Cuba se ha intensificado en las últimas horas con la rotura de una tubería de gas manufacturado en dos municipios de La Habana, lo que obligará a una interrupción del servicio de gas durante varios días.
La Empresa de Gas Manufacturado, parte de la empresa estatal CUPET, anunció el miércoles 7 de mayo que realizará los trabajos necesarios para sustituir el tramo averiado en la avenida 51, desde 96 hasta 100, en un intento por garantizar la estabilidad del servicio en los municipios de Playa y Marianao.
La reparación de la tubería causará una “parada total” en la planta de producción #2, lo que afectará directamente a los habitantes de ambos municipios.
Según el comunicado, el suministro se interrumpirá entre las 10:00 p.m. del viernes 9 de mayo y las 4:00 a.m. del sábado 10, lo que afectará por completo el suministro de gas en esas áreas. La empresa ha pedido disculpas a la población por los inconvenientes, asegurando que la interrupción es necesaria para restablecer el servicio a largo plazo.
⚠️ #Atención
Nota informativa de la Empresa de #GasManufacturado. pic.twitter.com/nk6EJSOrrf— CUPET (@Cubapetroleo1) May 7, 2025
Crisis en Cuba: más allá del gas manufacturado
El problema con el suministro de gas manufacturado es solo una de las causas de la profunda crisis energética que atraviesa Cuba. La escasez de gas licuado afecta a toda la Isla y ha forzado a muchos ciudadanos a hacer largas colas, esperando horas e incluso días sin éxito para adquirir el combustible necesario para cocinar.
Ante la imposibilidad de conseguir gas licuado, miles de familias se han visto obligadas a recurrir a leña y carbón como alternativa. A su vez, esto ha hecho que el carbón alcance precios abusivos en el mercado informal, el único lugar donde se puede conseguir debido a la escasez.
A finales de abril, la planta de producción #1 (Melones) en La Habana ya había interrumpido el servicio en varios municipios, incluyendo Plaza de la Revolución, La Habana Vieja, Centro Habana, Cerro y Diez de Octubre, para llevar a cabo trabajos de mantenimiento considerados “inaplazables”. A pesar de los esfuerzos por estabilizar el suministro, la crisis persiste, y no se perciben soluciones inmediatas por parte del gobierno castrista.
El gobierno cubano ha señalado que la escasez de gas licuado persiste debido a la falta de suministros internacionales.
A medida que la crisis energética se profundiza, los cubanos se ven cada vez más desbordados por las dificultades cotidianas, mientras el gobierno continúa sin ofrecer soluciones claras y sostenibles para restablecer el suministro de gas.
