El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, contra todas las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguró el martes que no hay razón para decretar la cuarentena obligatoria y catalogó al coronavirus de “gripecita”.
“El virus llegó (…) y en breve pasará”, manifestó el mandatario de ultraderecha durante una intervención transmitida en radio y televisión, donde además subrayó que la vida debe seguir y el ingreso de las familias, preservado.
Durante su discurso, Bolsonaro volvió a criticar las medidas adoptadas por algunos gobernadores del país —por ejemplo, el estado de Sao Paulo— que han declarado cuarentena a toda la población. También se pronunció en contra de “la prohibición del transporte” y el “confinamiento en masa” para contener la pandemia.
“No hay por qué cerrar escuelas cuando en el mundo los más afectados por la pandemia son las personas mayores de 60 años”, dijo, el presidente quien arribó hace solo unos días a los 65 años de vida.
“En mi caso particular, en el caso de que fuera contagiado, no precisaría preocuparme, porque sería una gripecita, un resfriadito”, añadió. “El 90 % de nosotros no tendremos ninguna manifestación si nos contagiamos”.
De acuerdo con el mandatario, su Gobierno está adoptando todas las medidas necesarias para proteger a la población, pero sin “histeria” y “pánico”.
Actualmente, Brasil registra cerca de 2.201 casos de coronavirus y, al menos, 46 muertes por causa de la pandemia.
