FARÁNDULA

Daddy Yankee, J Balvin y otros artistas sufren hackeo de sus cuentas oficiales

Un grupo de hackers conocido como “Los Pelaos” intervino las cuentas de varios artistas este martes 5 de abril, entre ellos los reguetoneros Daddy Yankee y J Balvin.

Los efectos del hackeo, del que también el cantante canadiense Justin Bieber fue víctima, se dejaron ver a través de extrañas publicaciones que desconcertaron a los seguidores.

Daddy Yankee, quien recientemente anunció su gira del retiro prometió una futura colaboración con “Harry Styles”, mientras que J Balvin publicó una respuesta tardía al pleito que mantenía con Residente hace unas semanas.

El hackeo a las páginas oficiales de artistas no se limitó a intérpretes latinos, pues además de Bieber, grandes estrellas como Ariana Grande, Michael Jackson y Eminem vieron sus cuentas tomadas por los ciberdelincuentes.

Los Pelaos hackearon también las cuentas de The Weeknd, Drake, Travis Scott y Lil Nas X, y aunque permanecieron solo por un breve tiempo en las cuentas mencionadas, fue suficiente para mostrar la vulnerabilidad de los artistas y causar revuelo en las redes sociales.

De acuerdo con el medio español El Diario, el hackeo fue una especie de protesta contra el arresto del estafador Paco Sanz, arrestado en España por varios fraudes financieros.

En la mayoría de los casos, el hackeo hizo que en los canales de artistas consagrados aparecieran videos del famoso Paco Sanz tocando la guitarra, sin embargo, fueron dados de baja en cuestión de minutos.

Como parte del movimiento “Free Paco Sanz”, Los Pelaos ya había hackeado otras cuentas, como las de algunos programas del canal de televisión La Sexta, aunque este es su primer atentado grande internacional.

¿Quién es Paco Sanz?

Paco Sanz trabajaba como guardia de seguridad, hasta que en 2009 fue diagnosticado con el Síndrome de Cowden, enfermedad que genera la aparición de tumores benignos.

Tras este diagnóstico, ganó fama asegurando que padecía una patología muy grave, por lo que pidió numerosas donaciones que recibió y gastó en viajes de lujo, tecnología de alta gama, automóviles, y muchos bienes más.

Fue condenado a dos años de prisión tras su estafa y obligado a pagar una indemnización de 37.000 euros a los afectados.

Sin embargo, el estafador aún cuenta con un séquito que lo defiende y que se enfoca en continuar su lucha para lograr que lo liberen.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas