“¡Dan asco!”: Así son los locales de aislamiento por coronavirus en Baracoa
No hay que ser opositor para decir lo mal hecho. Así piensa un cubano que decidió sacar a la luz pública las indignantes fotos de los locales de aislamiento en los que las autoridades de Baracoa están alojando a familias con sospecha de coronavirus.
Ángel de la Rosa no pudo contener su enojo cuando una doctora cubana le hizo llegar las imágenes que tomó en un improvisado local de aislamiento en la Ciudad Primada, a donde enviaron a decenas de personas, incluyendo niños pequeños, la madrugada del viernes.
“Así fue nuestra noche luego de que nos fueran a buscar en nuestros hogares a las 12:45am y llegamos al lugar de aislamiento localizado en el pre (preuniversitario) de San Luis, Baracoa”, comienza la publicación.
Según le explicó la doctora, las familias se negaron a ingresar y pasar la noche en el local dada las pésimas condiciones de higiene que presenta. “Preferimos dormir afuera, en la plaza de la escuela, al sereno, aguantando frío”.
La gran mayoría de las personas puestas en aislamiento en San Luis son médicos, enfermeras, personal de higiene. También integran el grupo una embarazada, dos personas que recientemente se sometieron a cirugías y cinco menores de edad.
Todos de una forma u otra estuvieron en contacto con un paciente positivo de Covid-19 en Baracoa.
“Miren nada más el lugar tan bajo, sucio y denigrante donde querían que nos aisláramos por 14 días…. A mí que me critiquen si quieren, que tomen represalia en mi contra, porque así es como funciona esto cuando mostramos la verdad y no con palabras, sino con evidencias que son más que suficientes”, escribió.
La doctora explicó que pasó una noche “horrible” junto a sus hijos y otras 11 personas.
“Lo más duro es que un hijo te diga ‘mami tengo hambre, tengo frio, vámonos para la casa, a qué vinimos aquí si en la casa estamos mejor’. No quiero que malinterpreten, quiero que sean sinceros y digan al mundo la verdad”.
Para los aislados, “lo primero que no hay es vergüenza de nuestros dirigentes”, dado que ni siquiera higienizaron el lugar para ser habitado por posibles enfermos.
“Ese mismo lugar podían haberlo limpiado organizado, ventilado y con una capacidad límite según las normas… no es que quiera hablar mal de nada porque los hechos los delatan”, concluyó.
