Denuncian estafa de una empresa fantasma en Hialeah dedicada al envío de motos a Cuba
Un cubano residente en Hialeah denunció que fue víctima de una compañía fantasma que se dedicaba presuntamente al envío de motocicletas desde Estados Unidos a la Isla.
El hombre, identificado como Orlando Arteaga, indicó a la prensa local que había comprado una moto en abril del año pasado, valorada en unos 1.950 dólares, la cual deseaba enviar a la Mayor de las Antillas.
Para ello, acudió a la agencia ‘Bluefields Import and Export’, cuya sede presuntamente se encuentra al este de la ciudad de Hialeah, en Miami-Dade.
“Cuando buscabas en Google, envío de motos a Cuba, era una de las primeras empresas que aparecía. Entonces, yo fui personalmente y compré la moto, tengo fotos de ella y todo”, dijo el hombre ante las cámaras de América TeVé.
Arteaga señala que llenó el papeleo necesario y realizó los pagos requeridos, por lo que esperaba que su paquete arribara a La Habana entre agosto y septiembre de 2022, algo que no pasó.
Al percatarse de que ya había pasado demasiado tiempo, Arteaga decidió acudir a las oficinas de la compañía, a donde se había dirigido meses atrás, sin embargo, al llegar se dio cuenta de que las oficinas de esta habían desaparecido.
“Ya estaba cerrada. En la puerta decía que llamaran a un número telefónico e incluso tenían un supuesto WhatsApp. Envié una foto de la factura de la compra, que estaba averiguando sobre el paradero de la moto y nunca me contestaron”, añadió.
El hombre asegura que ha intentado contactar de todas las maneras posibles a Lázaro Mendoza, presunto propietario de la compañía fantasma, pero, hasta ahora, no ha logrado obtener respuestas, su dinero, o la moto de regreso.
La víctima de esta estafa acudió a la policía de Hialeah para interponer una denuncia, por lo que las autoridades ya se encuentran investigando el caso, en el cual hay más personas que también cayeron en la trampa de la compañía fantasma.
Al respecto, el sargento José Torres, de la policía de Hialeah, recomendó revisar con detenimiento estas compañías a la hora de acudir a Internet, señalando que había que estar pendientes de posibles comentarios negativos dados por los clientes de estas.
El medio local intentó contactar con la compañía, pero los números que utilizaron los clientes en aquella ocasión ya estaban desconectados, y la página web ya le pertenecía a otra empresa.