Detenido en Miami: tiraron sus artículos religiosos e intentó quemar su casa
El hombre reaccionó violentamente al descubrir que un familiar había echado sus cosas a la basura. El hecho escaló hasta requerir la ayuda de la policía
La policía del condado de Miami-Dade arrestó el martes a Luis Fernando Garcés, un hombre de 58 años originario de Colombia, tras ser acusado de intentar incendiar una propiedad, luego de un altercado violento en su hogar.
Según el reporte policial compartido por el periodista Javier Díaz de Univisión, Garcés reaccionó de forma violenta al descubrir que un familiar había arrojado sus artículos religiosos a la basura. Este acto desencadenó una serie de eventos que culminaron con daños a la propiedad y el intento de incendiarla.
“Colombiano es arrestado en Miami tras intentar incendiar su casa después que un integrante de su familia le botara sus artículos religiosos”, indicó el comunicador.
Las autoridades trataron el incidente como un caso de violencia doméstica, y tras ser herido durante el altercado, Garcés fue trasladado a un hospital.
Después de recibir atención médica, el colombiano fue arrestado y presentado ante un tribunal, donde se le impusieron cargos por violencia doméstica. Durante la audiencia, el juez le negó el derecho a fianza.
“El caso ocurrió el 1 de mayo y hoy se presentó en corte donde le negaron su fianza. El hombre había destruyó el interior de la vivienda que se localiza en el SW de Miami-Dade”, concluyo Díaz.
Inicialmente, Garcés fue identificado como un ciudadano cubano, pero el periodista de Univisión corrigió esta información pocas horas después de publicar la noticia, confirmando que este era originario de Colombia.
En el estado de Florida, las penas por violencia doméstica varían dependiendo de la gravedad del acto, e incluyen desde tiempo en prisión hasta órdenes de restricción contra la víctima.
En situaciones más graves, el agresor puede enfrentar desde unos pocos días hasta varios años de encarcelamiento, con la posibilidad de libertad condicional, en caso de que se considere apropiado.
Además, las personas condenadas por estos delitos pueden ser objeto de multas y, en ciertos casos, obligadas a participar en programas de intervención para agresores. En ocasiones, también se pueden imponer servicios comunitarios como parte de la sentencia.
