La inflación en EEUU continúa elevándose, alcanzando en marzo los niveles más altos en los últimos 40 años.
De acuerdo con datos revelados por la Oficina de Estadísticas Laborales, el Índice de Precios al Consumidor subió un 8,5% a finales de marzo, esto sin tomar en cuenta los cambios estacionales, superando así las elevadas cifras que se obtuvieron en febrero, que fue del 7,9%, algo que no se había visto desde diciembre de 1981.
Según CNN, la mayor parte de este aumento fue impulsado por un incremento en el precio de la gasolina y de varios alimentos, los cuales han ido en subida desde que inició la invasión de Rusia en Ucrania. De igual manera, el reciente repunte en los costos de la vivienda jugó un papel en este incremento.
El economista de Barclays, Pooja Sriram, advirtió que la guerra en Ucrania no tiene un final visible, por lo que se debe esperar que la inflación continúe subiendo.
Al respecto, el experto calcula que la inflación anual en EEUU sea del 6,4% para junio y baje al 4,4% a finales del 2022.
Es necesario mencionar que conforme la pandemia del COVID-19 se ve más controlada, los precios de vivienda alcanzan de nuevo los niveles que tenían antes.
El citado medio señala que, excluyendo las categorías de alimentos y energía más volátiles, los precios se incrementaron en un 6,5% en los últimos 12 meses, lo que representa el mayor salto de este tipo desde agosto de 1982.
Por su parte, los precios de la energía aumentaron en un 32% en lo que va del año, mientras que el de los alimentos lo hizo en un 8,8 %, el más alto en los alimentos desde mayo del 81.
En cuanto a los precios al consumidor, estos se elevaron en un 1,2% con los ajustes estacionales, mientras que los boletos de avión, el mobiliario, la atención médica y los seguros de vehículos también vieron un incremento en sus precios.
