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El precio del gas licuado y del agua en Cuba aumentará en 2024

Con este aumento, los tanques de 45 Kg de gas licuado superarán los 1.000 pesos cubanos (CUP) a partir de enero

Como parte de las medidas neoliberales que el gobierno castrista implementará el próximo año en la Isla para lidiar con la crisis económica del país, se decidió un aumento en el precio del gas licuado y del agua no metrada.

Este incremento entrará en vigor a partir de enero de 2024, según indicó el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz.

De esta manera, recuperar la economía del país, que se encuentra en un estado crítico, recaerá sobre el pueblo, el cual deberá pagar alrededor del 25% más por los servicios básicos como agua y electricidad.

En el caso del agua no metrada, que llega a los hogares a través de acueductos, tendrá un incremento desde los siete pesos cubanos (CUP) que se pagan actualmente hasta los 24 CUP. El funcionario intentó minimizar la situación, señalando que, más que una política recaudatoria, el cambio buscaba “estimular el ahorro de agua” en la Isla.

El primer ministro indicó que el Estado subsidia la diferencia entre las tarifas de comercialización y el costo del metro cúbico del agua, lo que tiene un costo de unos 900 millones de CUP al año.

Por su parte, el gas licuado en cilindro verá un aumento del 25%, haciendo que el precio de una balita de 10 Kilogramos (Kg), la cual pasó a costar 180 CUP tras la “Tarea Ordenamiento”, ahora costará 225 CUP. Por su parte, los tanques de 45 Kg pasarán de costar 810 CUP a 1.014 CUP a partir de enero de 2024.

Más servicios afectados

Las autoridades han estado anunciando una serie de cambios que afectarán los precios de varios productos y servicios a partir del próximo año, uno de ellos siendo la energía eléctrica. Y es que los cubanos que consuman más de 500 kWh al mes tendrán que pagar 25% más.

Marrero afirmó que un aumento en los precios que manejan los mercados internacionales de combustibles habían causado directamente este cambio, pues “casi todo” el combustible utilizado por Cuba para generar electricidad tenía que ser importado.

En un intento por calmar a la población, el funcionario aseguró que la nueva medida no iba a afectar a la mayoría de la población, pues, según la Unión Eléctrica de Cuba, el 94% de la población consume solamente unos 300 kWh mensuales.

Sin embargo, los trabajadores por cuenta propia que realicen estas actividades laborales en sus hogares deberán de asumir este aumento en el precio, lo que, a su vez, generará un incremento en el costo de todos los servicios y productos que ofrezcan al público, haciendo que el pueblo sea quien termine absorbiendo este nuevo gasto.

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