Después del aclamado éxito que tuvo la filmografía Rocket Man en las salas de cine, Elton John se sentó para escribir un libro autobiográfico que saldrá a la venta el próximo 15 de octubre y se llamará “Me: Elton John”. En la publicación relatará de manera más íntima todos los episodios en que se ha visto envuelto el cantautor británico.
Uno de los episodios más candentes de su vida fue cuando estuvo inmerso en el mundo de las drogas. Confiesa que no necesitaba consumir drogas para ser una persona sociable, como algunos otros de sus compañeros del espectáculo han confesado.
El pianista oriundo de Pinner, en el distrito de Harrow comentaba que era una persona “lleno de energía, era curioso, tenía sentido del humor y sed de conocimiento: no necesitaba una droga para hablar con la gente”. Pero comenta que “había algo más en la cocaína que la forma en que me hacía sentir. La cocaína tenía un cierto prestigio. Estaba de moda y era exclusivo. Hacerlo era como convertirse en miembro de una pequeña élite, que secretamente se entregaba a algo atrevido, peligroso e ilícito. Patéticamente, eso me atrajo mucho”.
En su libro admite que empezó a consumir drogas en 1974 y que su “apetito por la droga era increíble”. Confiesa que le “gustaba cómo me hacía sentir. Esa sacudida de confianza y euforia, la sensación de que de repente podía abrirme, de que no me sentía tímido o intimidado, de que podía hablar con cualquiera”.
En un capítulo del libro comenta que, en el festival de Cannes de 1983, su asistente personal lo despertó en su hotel. “Me sentía peor que después de la fiesta de fin de año de Ringo Starr en 1974, que comenzó a las ocho de la noche y terminó alrededor de las tres y media de la tarde al día siguiente”, continúa narrando que sentía un dolor en todo el cuerpo, especialmente en la mano a lo que su asistente lo llevó a su propia habitación donde pudo ver “una escena de total devastación” ya que no hubo un solo mueble intacto, excepto la cama.
Comenta que la noche anterior se había encontrado con los integrantes del grupo Duran Duran en el lobby de su hotel por lo que se dispuso a tomar unas copas antes de ir a grabar el video de su sencillo “I´m still standing”, durante una hora, recuerda haber inhalado ocho martinis de vodka y “un par de líneas de coca”. Cuando llegó al set de grabación cuenta que exigió que “empezaran a rodar las cámaras, me quité toda la ropa y empecé a rodar desnudo por el suelo”.
“Mi entonces manager, John Reid, estaba allí, actuando como extra en el video, vestido como un payaso. Se quejó conmigo, una intervención que tomé muy mal”, añadió. “Tan mal, de hecho, que le di un puñetazo en la cara”, gracias a esto, es que tenía el dolor en la mano.
Presentación con los Rolling Stones
El afamado cantante cuenta que en 1975 tuvo una presentación con los Rolling Stones en Colorado, EE.UU. Los integrantes de la banda de rock invitaron a la estrella de pop a subir al escenario y narra que “si no hubiera estado drogado de la cabeza cuando los Rolling Stones aparecieron en Colorado y me pidieron que subiera al escenario con ellos, podría haber interpretado “Honky Tonk Women”, saludar a la multitud y salir”.
Pero el consumo de la droga hizo que se quedase más de la cuenta en el escenario; “en vez de irme, decidí que me estaba yendo tan bien que me quedaría y tocaría con el resto del grupo, sin antes tomar la precaución de preguntar a los Stones si querían un tecladista auxiliar. Por un momento, pensé que Keith Richards no dejaba de mirarme porque estaba impresionado por la brillantez de mis improvisadas contribuciones a su obra. Después de un par de canciones, finalmente penetró en mi cerebro que la expresión de su cara no era realmente sugestiva por una profunda apreciación musical”.
Cuando Elton John se percató de la incomodidad del guitarrista británico rápidamente se salió del escenario y relata que “Keith seguía mirándome de una manera que sugería que discutiríamos esto más tarde, y decidí que sería mejor que no me quedara para la fiesta después del show”.
Elton John se lamenta el haber estado inmerso en el mundo de las drogas por 16 años diciendo que “ese era el problema. Porque estaba tomando coca, ya no era un ser humano racional” y sigue diciendo que “te vuelves irracional e irresponsable, obsesionado contigo mismo, una ley para ti mismo”. Al final concluye “es una droga horrible”.
Con Información de Infobae
