Estudio asegura que la contaminación del aire puede afectar al feto en el útero
Un grupo de investigadores pertenecientes a la Universidad Hasselt publicaron un artículo en la revista Nature Communications con evidencia de que la contaminación del aire puede atravesar la placenta de una madre y llegar potencialmente al feto en el útero, lo que aumenta la posibilidad de futuros problemas de salud.
En una muestra de 25 mujeres examinadas se determinó que aquellas que al estar en su periodo de gestación respiran la contaminación de carbono negro, creada por la combustión de combustibles fósiles, como en automóviles a diesel o la quema de carbón, están más propensas a transmitirle al feto las partículas de carbono que están en sus pulmones por medio de la placenta.
“El aire sucio se ha relacionado previamente con el aumento de abortos espontáneos, nacimientos prematuros y bajo peso al nacer entre los bebés, como resultado de los efectos de la contaminación en la madre”, son algunos de los resultados del estudio.
En el pasado se pensaba que la placenta actuaba como barrera protectora, una especie de escudo donde el feto en su interior estaba cuidado de todos los males del organismo de la madre pero esto ha comenzado a ser desmentido.
Un estudio el año pasado fue el primero en sugerir que este no era el caso, después de que se encontraron contaminantes en las placentas de cinco mujeres embarazadas en Reino Unido.
Las conclusiones, aunque no definitivas, fueron posibles gracias al examen de las placentas de esas 25 mujeres que una vez que dieron a luz fueron llevadas al laboratorio para ser investigadas a fondo.
“Cuando las mujeres estuvieron expuestas a más carbono negro durante el embarazo, se encontró más carbono negro en la placenta”, señala la investigación.
Las partículas de carbono negro provienen de una variedad de fuentes, así como de automóviles y plantas de energía: biomasa y estufas de carbón en los hogares, lámparas de queroseno y quema de tierras agrícolas para la agricultura.
Con información de CNN